Esta normativa establece que quienes introducen material de envases y embalajes al mercado deben asegurar la recuperación de dicho material, evitando que terminen en los rellenos sanitarios junto con los residuos sólidos domiciliarios. La capital de Colchagua, junto a Pichilemu y Rancagua, es una de las tres comunas de la región de O’Higgins que llevan adelante este programa piloto.
La encargada de la Unidad de Gestión Ambiental (UGA), Daniela Rojas, dio cuenta que, en esta primera etapa, el municipio se ha enfocado en la reutilización masiva de vidrio, para lo cual se instalaron 24 campanas de reciclaje en diversos puntos del radio urbano de San Fernando.
La disposición de estos contenedores comenzó en septiembre, y “esperamos que podamos realizar el primer recuento para evaluar la aceptación de la comunidad ante este proceso. Este esfuerzo también va acompañado de campañas de educación ambiental”.
En tanto, explicó que próximamente también se dará inicio a la segunda etapa del programa, que incluirá la recolección selectiva domiciliaria. Para ello se proporcionarán contenedores especiales a los hogares a fin de facilitar la separación de envases y embalajes livianos. Un camión recolector pasará en horarios específicos, en días determinados de la semana, para recoger este material.
La recolección de vidrio se llevará a cabo en colaboración con la empresa KDM Industrias.
Además, para mejorar la accesibilidad al reciclaje, próximamente estará disponible una app donde los usuarios podrán ingresar la dirección de su hogar y georreferenciar la campana más cercana para depositar vidrio. De igual modo también se podrá acceder a la página «Reciclar es Resimple», donde se ofrecerán videos educativos sobre el reciclaje de diversos artículos.