El director nacional de Gendarmería, Sebastián Urra, se refirió a los recientes incidentes ocurridos en el penal de La Gonzalina, donde la seguridad y la infraestructura del establecimiento se encuentran en el centro de las preocupaciones. Urra, en atención a los medios en el exterior de la cárcel de Rancagua, detalló las revisiones realizadas a las instalaciones y los planos de intervención para abordar las áreas que requieren reparación urgente.
El tema de la seguridad también fue abordado tras los incidentes recientes, entre ellos la supuesta amenaza que habría recibido Manuel Monsalve, ex subsecretario del Interior, mientras se encontraba internado en el hospital penitenciario de La Gonzalina. «El señor Monsalve se mantiene en uno de los módulos que están en condiciones de seguridad adecuadas», descartando que haya recibido amenazas de muerte. «Improperios sí, amenazas no», puntualizó el director, refiriéndose a situaciones comunes dentro de los recintos penitenciarios.
Con relación con las preocupaciones de la defensa de Monsalve sobre su seguridad, el director expresó plena confianza en el personal de Gendarmería para manejar situaciones de alto riesgo, «tanto de internos como de otros sectores, para que el despliegue sea seguro», afirmó.
El suceso ocurre en medio de crecientes preocupaciones por la seguridad en el penal de La Gonzalina, que ha estado en el centro del debate por la falta de personal para custodiar a internos de alto perfil. Recientemente, se registró la fuga de dos reos, quienes, utilizando una cuchara para forzar una cerradura, lograron escapar, aunque fueron recapturados rápidamente.
Es en este contexto que se encuentran en el penal los diputados Diego Schalper y Natalia Romero, junto a la presidenta de la Comisión de Seguridad de la Cámara, Gloria Naveillán, para fiscalizar la seguridad y los reparos que hacen los funcionarios de Gendarmería de La Gonzalina.