
A pesar que la ley de igualdad de remuneraciones entre hombres y mujeres que realizan la misma labor está vigente desde el año 2009, a la fecha no hay denuncias en la Región.
La Ley 20.348, que resguarda el derecho a la igualdad de remuneraciones entre hombres y mujeres, fue promulgada el 2 de junio de 2009, por la entonces Presidenta de la República, Michelle Bachelet, y entró en vigencia el 19 de diciembre de mismo año, con su publicación en el Diario Oficial.
La normativa, aprobada por unanimidad por el Congreso, establece el principio de igualdad de salarios entre ambos sexos, cuando cumplan la misma función en una misma empresa, incorporando la obligación del empleador a cumplir este principio, pero no considera arbitrarias las diferencias objetivas en las remuneraciones que estén fundadas, entre otras razones, en las capacidades, calificaciones, idoneidad, responsabilidad o productividad del trabajador o trabajadora.
De acuerdo a la ley, las empresas que tengan 10 o más trabajadores permanentes, deben establecer en su reglamento interno un procedimiento aplicable a las denuncias fundadas por discriminación salarial por sexo. Del mismo modo, a las empresas de 200 o más trabajadores se les otorgó un plazo de seis meses desde la entrada en vigencia de la ley, para elaborar un registro de los cargos y funciones y sus características técnicas esenciales.
Asimismo, para el sector público, la normativa modificó el Estatuto Administrativo, resguardando el principio de igualdad de trato remuneracional entre funcionarios y funcionarias a contrata.
A más de un año de su vigencia, la normativa aún está en proceso de socialización a la ciudadanía y a los actores del proceso en el marco laboral. Así lo señaló Rosa Sandoval, directora regional (S) del Trabajo de la Región del Libertador, quien precisó que hasta la fecha, en esta zona no se han registrado denuncias sobre el particular.
La profesional aclaró que si bien la situación de vulneración de los derechos se da entre hombres y mujeres, no es así cuando se trata de un caso entre dos mujeres, ni tanpoco cuando un hombre se sienta menoscabado en su sueldo con respecto al de una mujer.
Rosa Sandoval precisó que si alguna mujer se siente discriminada por sus remuneraciones, debe, primero, presentar por escrito su situación al empleador, el que tendrá 30 días para darle una respuesta. Si no hay respuesta o ésta no es satisfactoria, la afectada puede recurrir a la Dirección del Trabajo y presentar la denuncia, iniciando un “procedimiento de tutela de derechos fundamentales”, que buscará lograr un acuerdo entre las partes.