Las obras permitieron renovar infraestructura, mejorar procesos y modernizar equipamiento, asegurando estándares higiénico-sanitarios para la entrega de alimentos a pacientes y servicios clínicos.
El máximo tribunal respaldó los criterios de las instancias inferiores, que identificaron deficiencias en el diagnóstico y manejo clínico de la paciente durante su hospitalización en 2017.