El Gobierno promulgó la Ley N° 21.778, que establece la obligatoriedad de una hora diaria de actividad física en todos los establecimientos educacionales del país, desde educación parvularia hasta enseñanza media. La medida, publicada en el Diario Oficial el pasado 25 de noviembre, comenzará a aplicarse de manera progresiva a partir de 2027 y su objetivo es enfrentar el sedentarismo y la obesidad infantil presente entre los escolares del país.
Tras 14 años de tramitación, finalmente la iniciativa dispone que los colegios públicos y privados deberán garantizar 60 minutos de movimiento, juego activo o deporte dentro de la jornada escolar, tiempo adicional que no se computa a la asignatura de educación física. En definitiva, no se trata sólo de deporte formal, si no de juegos, pausas activas, recreos dinámicos o actividades lúdicas que los establecimientos deben incorporar en distintas partes de la jornada.
Sin embargo, especialistas advierten que la implementación enfrenta desafíos. Eugenio Fierro, preparador físico y conferencista High Fitness, señaló que “si bien es cierto que la ley tiene una intención positiva para poder disminuir la inactividad física y los niveles de sobrepeso, ahora hay que ver si esa intención realmente puede tener una buena acción en donde se va a implementar”.
El experto recordó experiencias internacionales: “En Dinamarca propusieron que los niños se movieran 45 minutos diarios, pero finalmente el impacto real de actividad física moderada o vigorosa no superaba los 8 minutos”.
Fierro también subrayó que no basta con sumar tiempo de movimiento: “No solamente hay que pensar en cantidad de minutos, sino en la calidad de la actividad que se vaya a hacer”.
La ley también establece condiciones de inclusión y seguridad, garantizando participación de estudiantes con discapacidad y ajustes razonables para la adecuada implementación operativa. Su puesta en marcha será gradual en los recintos educativos, empezando en 2027 con la educación parvularia hasta cuarto básico, y desde 2028 aumentará desde quinto básico a cuarto medio. Con esta nueva normativa, Chile se suma a países como Finlandia, Francia y China, que ya integran actividad física diaria en sus sistemas escolares, sólo falta esperar un impacto real y positivo en la salud y la convivencia escolar al interior de los planteles.






