Comprar en plataformas como Aliexpress, Shein o Temu dejará de ser tan barato para los consumidores chilenos. Esto, porque a partir del 25 de octubre comenzará a regir la Ley 21.713, normativa que establece la aplicación del Impuesto al Valor Agregado (IVA) y, en algunos casos, de aranceles aduaneros sobre productos adquiridos en el comercio electrónico internacional.
El objetivo de la ley es equiparar las reglas del comercio local e internacional, de modo que quienes compren en el extranjero también contribuyan al financiamiento del gasto público, tal como lo hacen los consumidores en el mercado nacional.
En la práctica, las compras que sean inferiores a 500 dólares quedarán sujetas a un 19% de IVA, que se incluirá automáticamente al valor final informado al momento de la compra. Por otra parte, si el pedido supera los 500 dólares, se aplicará un arancel aduanero del 6%, además del 19% de IVA.
Aunque la normativa comenzará a regir en octubre, existen dudas respecto a cómo operará el sistema en las distintas plataformas digitales. Sin embargo, autoridades y expertos coinciden en que la medida busca transparentar los precios y asegurar una recaudación justa para el Estado.
En este contexto, Gonzalo Escobar, académico de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad Andrés Bello, explicó la lógica detrás de la medida: «Los impuestos son la principal fuente de ingresos del Estado y financian servicios públicos como salud, educación y seguridad. Esta nueva ley refleja cómo el Estado regula ciertos consumos y asegura que quienes compran productos del extranjero también contribuyan al financiamiento del gasto público» señaló.