Hace 3 años la piscina municipal de Rancagua fue cerrada para el uso del público, debido a fallas estructurales severas que tenía la instalación y problemas judiciales con el cierre perimetral del lugar.
Sin embargo, el municipio junto a sus nuevas autoridades ya tomó una decisión al respecto e inició el proceso de evaluación para recuperar el recinto que se ubica al interior del complejo Patricio Mekis.
Durante esta semana, profesionales de la Secretaría de Planificación, visitaron el recinto y en compañía de funcionarios de la Corporación de Deportes, realizaron el primer levantamiento en terreno, a fin de establecer las prioridades para este año.
Al respecto, el alcalde de Rancagua, Raimundo Agliati sostuvo que, “nuestro compromiso como administración es claro: reparar, recuperar y devolver este espacio tan importante para la comunidad. Queremos que vuelva a ser un lugar de encuentro, recreación y de vida para todos los vecinos. Aún es muy anticipado para hablar de plazos, pero sí, haremos todos los esfuerzos para que sea lo más pronto posible”.
En el marco de la inspección, el análisis estuvo centrado en la sala de bombas y principalmente, en el cierre perimetral, fuente del conflicto judicial aún presente.
Para cerrar, el director ejecutivo de la Corporación Municipal de Deportes, Felipe Arenas, manifiesta que si bien los trabajos ya están en fase de planificación, “nada asegura que la piscina estará disponible el próximo verano, pero tengan por seguro que haremos todo lo posible”.
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