Daniel Morales Poso, exalumno del Liceo Óscar Castro Zúñiga de Rancagua, se convirtió en uno de los destacados puntajes nacionales en Matemática de la última PAES. Con 18 años, el joven oriundo de Machalí atribuye este logro a su dedicación, al apoyo de sus padres y profesores, y a su pasión por los números. “Desde pequeño sentí que las Matemáticas eran lo mío, y siempre tuve a mi lado a profesores que me motivaron a dar lo mejor de mí”, relató Daniel en entrevista con El Tipógrafo.
Daniel inició su formación escolar en el Colegio Arturo Prat de Machalí, un establecimiento pequeño que, según él, fue clave para desarrollar su interés por las Matemáticas. «Es un colegio pequeño, pero con grandes docentes que me impulsaron desde el principio», comentó. Posteriormente, en el Liceo Óscar Castro, encontró un ambiente de excelencia académica que lo llevó a prepararse para rendir la PAES con los mejores resultados.
El joven ya tiene claras sus opciones para la educación superior. Postuló a Ingeniería Civil Industrial en la Pontificia Universidad Católica de Chile como primera preferencia, seguido por la Universidad de Chile y la Universidad Federico Santa María. Además, sueña con trabajar en el ámbito minero, inspirado por su familia, donde varios de sus integrantes se dedican a esa área. “Quiero seguir los pasos de mis familiares en la minería, pero también tener la oportunidad de aplicar mis habilidades en otras áreas relacionadas con la logística y la resolución de problemas”, afirmó.
En su mensaje a otros estudiantes, especialmente a quienes no obtuvieron los resultados esperados, Daniel fue enfático: “Un año no define toda una vida. Si no fue esta vez, es importante reflexionar, prepararse, y encontrar algo que realmente les apasione. Estudiar algo que nos guste es clave para el futuro”.
Este logro no solo es motivo de orgullo personal, sino también familiar. Daniel destacó que sus padres jugaron un rol fundamental en el proceso, apoyándolo con su ingreso a un preuniversitario y dándole la motivación necesaria para enfrentar este desafío. “Este no es un logro personal, es un logro familiar. Sin ellos, no habría sido posible”, señaló con emoción.
El caso de Daniel Morales es una muestra de que el esfuerzo, sumado al respaldo de una red de apoyo sólida, puede transformar sueños en realidad, motivando a toda una comunidad estudiantil a perseguir la excelencia.
Revisa la entrevista completa de Daniel:
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