La fallida subasta de las dependencias del Molino Koke y los sucesos que lo rodean han encendido el debate sobre el futuro de este espacio emblemático para el patrimonio cultural de la comuna de Rancagua.
Subasta sin comprador
El jueves 12 de diciembre, el Molino Koke, ubicado en Avenida Baquedano, fue puesto en remate a través de la plataforma Tattersall con un precio base de 35.000 UF, equivalente a más de $1.334 millones. La venta incluía más de 21 hectáreas, una construcción de 5.000 metros cuadrados y el mural más grande de Chile.
Sin embargo, Tattersall confirmó a El Tipógrafo que las dependencias no lograron ser adjudicadas ese día. Nadie presentó una oferta por el inmueble, por lo que se buscará reagendar el remate mediante la misma plataforma en una fecha aún por definir.
La defensa del emblemático lugar
Ante esta incertidumbre, el Colectivo Ambiental Parque Koke y la Junta de Vecinos del sector lanzaron, el lunes 16 de diciembre, una campaña de recolección de firmas ciudadanas. Su objetivo es defender y rescatar el Molino Koke, al que consideran un espacio clave para la identidad histórica y cultural de Rancagua. Hasta el momento, se han recopilado alrededor de 1.500 firmas.
“Además, se han desarrollado instancias de diálogo con actores clave y autoridades, buscando abrir caminos formales para la puesta en valor y el rescate del espacio. En ese contexto, se está gestionando una visita al Molino Koke con representantes municipales, la Dirección de Patrimonio y el MOP, luego de no haber podido concretar esta actividad el martes pasado. La visita tiene como objetivo evaluar en terreno el estado actual del sitio y visualizar su potencial patrimonial y cultural”, señalaron desde el colectivo.
Asalto en el molino: un episodio que agrava la situación
La madrugada del lunes 16, el recinto fue escenario de un asalto que se extendió por varias horas. Según Carabineros, cuatro sujetos encapuchados y armados interceptaron al guardia cerca de las 23:35 del domingo, lo intimidaron y sustrajeron diversas especies, cargándolas en un furgón blanco.
Los delincuentes abandonaron el lugar a las 4:30 de la madrugada en dirección desconocida. La Brigada Investigadora de Robos (BIRO) de la PDI quedó a cargo de las diligencias, aunque hasta ahora no se ha informado el avaluó de las especies sustraídas ni se ha identificado a los responsables.
El debate continúa
El futuro del Molino Koke sigue generando debate. El seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Cristo Cucumides Litin, fue enfático en mencionar que «los silos del Molino Koke no tienen una declaratoria oficial de protección patrimonial y tampoco son un monumento histórico, por ende, como institución no podemos intervenir en proyectos asociados a dicho inmueble”. No obstante, invitó a la Municipalidad de Rancagua y a la comunidad organizada “a abrir un proceso de declaratoria de zona de conservación histórica, con el fin de poner en valor dicho inmueble, que forma parte del patrimonio industrial de la Región de O’Higgins».
Por su parte, Leslie Araya Miranda, directora regional del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural (SERPAT), destacó que se encuentran “evaluando distintas alternativas de terrenos e inmuebles para instalar la nueva institucionalidad patrimonial que beneficiará la investigación local, instituciones públicas y privadas, personas, comunidades y pueblos, al resguardar, promover y difundir los valores patrimoniales de los distintos acervos patrimoniales de la región”, sin referirse específicamente al molino.
Mientras la comunidad permanece atenta al reagendamiento del remate, persisten las dudas sobre el destino de este emblemático espacio y los esfuerzos por preservar su legado patrimonial.