Con el propósito de relevar la importancia del cuidado integral a las personas que enfrentan un diagnóstico complejo de cáncer, el Hospital de Santa Cruz inició un trabajo enfocado en resaltar la labor de la Unidad de Cuidados Paliativos y Alivio del Dolor.
En el marco de lo anterior, inauguró un pendón institucional con una pieza gráfica que recoge la experiencia de la usuaria Maricel Velázquez, cuyo esposo, José Espinoza Opazo, fue acompañado por el equipo en su proceso de enfermedad. Su testimonio simboliza el sentido profundo de la unidad: entregar atención humanizada, alivio del dolor y acompañamiento en la etapa final de la vida, considerando siempre a pacientes y familias como un todo inseparable.
“El fortalecimiento de la Unidad de Cuidados Paliativos responde a nuestro compromiso de entregar atención digna y cercana a quienes más lo necesitan”, destacó el subdirector de Gestión del Cuidado, Sergio Valenzuela, afirmando que “la humanización en la atención es un pilar de nuestra labor. Cada esfuerzo que hacemos por fortalecer esta unidad busca entregar tranquilidad y apoyo tanto a los pacientes como a sus familias en momentos de alta vulnerabilidad”.
Durante la actividad, se destacó el liderazgo clínico de la Dra. Lourdes Vargas Zavala, médico jefe de la unidad, quien ha sido clave para consolidar un equipo interdisciplinario comprometido con entregar atención de excelencia, donde la cercanía y la empatía son pilares fundamentales.
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