El Club Rancagua Sur, elenco que milita en la Tercera División B del fútbol chileno, emitió un comunicado expresando su malestar ante la negativa de la Municipalidad de Rancagua de otorgarles subvención por segundo año consecutivo, lo que, según el club, ha dejado en una situación vulnerable su proyecto deportivo.
En el mismo comunicado, los «Rojinegros» acusaron una «persecución» por parte de los concejales Manuel Villagra y Patricio Henríquez, quienes habrían «menoscabado» su proyecto. «Han declarado que debemos cerrar el club si no contamos con los recursos», señalaron, haciendo alusión a los concejales como los únicos que rechazaron el proyecto.
«Reafirmamos nuestro compromiso con el deporte, la reinserción y las puertas que puede abrir el futbol, a pesar de toda adversidad, seguiremos trabajando para y por nuestra gente», concluyeron.
¿Cuál fue la respuesta del Concejo?
El Tipógrafo tomó contacto con uno de los aludidos en el comunicado. En esta oportunidad, fue el edil Manuel Villagra quien respondió, rechazando rotundamente lo que el texto describe.
De acuerdo a su versión, Villagra afirma que Rancagua Sur arrastra una deuda pendiente de 16 millones de pesos, los cuales fueron entregados hace tres años para su participación en la Tercera División.
No obstante, en la temporada 2022, el club fue expulsado de la categoría tras protagonizar actos de violencia en su duelo ante Colchagua. Ante este hecho, los recursos debían ser devueltos, pero hasta ahora solo han reintegrado 400 mil pesos.
Además, Villagra desmintió categóricamente la supuesta persecución de la que se le acusa, tanto a él como al otro concejal nombrado. «No se trata de una persecución, es un tema de rendición de cuentas«, explicando que la decisión fue tomada por unanimidad del Concejo debido al incumplimiento financiero.
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