Proyecto FIC busca incrementar la eficiencia en el uso del agua de riego en producción de arándanos

Esta iniciativa surge como la continuación de uno ejecutado en la región durante los años 2016 y 2019, llamado “Innovación y optimización del riego en arándanos (código 30474716-0)”, cuyo objetivo fue hacer frente a un problema que ya en esos años era muy importante, como es la escasez de agua para riego.

El proyecto introdujo e implementó en las Provincias de Colchagua y Cardenal Caro la utilización de sondas de capacitancia de lectura continua y discontinua, para definir tiempo y frecuencia de riego y aprovechar mejor el agua proveniente de los riegos. Los resultados obtenidos en dicho proyecto indican que, con esta innovación en el manejo hídrico se maximizó el potencial productivo y la calidad de la fruta, y se permitió ahorrar volúmenes considerables de agua, y por consecuencia, de energía eléctrica.

En particular, de los 6 campos en donde se aplicó el uso de la tecnología, en 4 se lograron ahorros en el volumen de agua para riego que oscilaron entre un 20% y un 30% (los resultados en extenso se encuentran en el informe final del proyecto), y en todos ellos se incrementó significativamente el crecimiento de las plantas, la producción y el calibre de la fruta. Por otra parte, en los ensayos de fertilización, cuya eficiencia aumenta conforme al incremento en la eficiencia en el riego, se logró reducir considerablemente las cantidades de fertilizantes aplicados por temporada, permitiendo un ahorro sustantivo en los costos de tales insumos.

En definitiva, el proyecto obtuvo resultados muy relevantes, y permitió desarrollar y validar un paquete tecnológico para el arándano, asociando y complementando esta tecnología al clima y determinando los umbrales de riego o líneas de gestión en función de la dinámica de captación de agua por las plantas. Además, se constató, por primera vez en la Región, que la tecnología es muy útil y funcional al cultivo del arándano para optimizar el riego, ahorrar agua, energía y fertilizantes.   

Uno de los focos en estudio es el “Incremento de eficiencia en el uso del agua mediante el uso techos plásticos y mulch”, sumado a la tecnología de sondas de capacitancia para medir en contenido de agua en el suelo. Como respuesta a eventos perjudiciales para la producción de arándanos derivados del cambio climático, tales como precipitaciones en cosecha y ocurrencia de heladas y granizos en etapa de crecimiento de la fruta, se está masificando con velocidad creciente el establecimiento de cobertores (techos) en los huertos.

Algunas experiencias sobre el uso de cobertores plásticos en arándanos y en otros frutales, señalan que el film de polietileno ayuda a incrementar las temperaturas mínimas en un rango de 2 a 3 °C respecto de la temperatura al aire libre (Portal Frutícola, 2016). Además, dichas estructuras otorgan protección contra lluvia y contra el viento, y contribuyen a anticipar la cosecha de fruta, entre otros beneficios (Bañados, 2017; Comité de Arándanos, 2017). Es importante considerar que los variados plásticos poseen distintas propiedades físicas (peso, densidad, espesor), ópticas (transmisión difusión de luz) y térmicas (calor retenido), por lo cual la elección del plástico a utilizar es muy relevante para los objetivos que busca el productor (Portal Frutícola, 2016).

Por otra parte, el uso de mulch sobre la superficie del suelo es una alternativa para disminuir la evaporación directa, como parte del balance hídrico, disminuyendo hasta 1 mm la pérdida de agua diaria en la época de máxima demanda, lo que en la temporada puede significar más de 1000 m3 de agua ahorrada (Seguel et al., 2020). Los diversos materiales a utilizar pueden variar desde textiles hasta plásticos, pasando por enmiendas orgánicas y residuos agroindustriales (Kader et al., 2017). Al respecto, el uso de residuos orgánicos como mulch pueden ejercer un efecto como enmienda orgánica, pero no tendrán la durabilidad que poseen los materiales plásticos. Indistintamente de ello, sus efectos sobre el balance hídrico dependerán del tipo de material, su color, dosis de aplicación y porosidad, pudiendo afectar también la dinámica de flujo y almacenamiento de calor en el suelo como gatillante de la actividad de raíces a salidas de invierno y regulador de procesos microbiológicos. Estos aspectos (balance hídrico y térmico) no han sido estudiados en el cultivo de arándanos y existe escasa información internacional al respecto.

Otro de los focos importantes, es continuar con el acompañamiento técnico permanente y capacitaciones a los productores que cuentan con sondas de capacitancia desde el proyecto FIC “Innovación y optimización del riego en arándanos” y capacitar a asesores INDAP en tecnologías que permitan optimizar el manejo del riego, su relación con el suelo y empleo de fertilizantes a través del riego.

Actualmente, el proyecto tiene a 22 productores como beneficiarios de las comunas de Chimbarongo, San Fernando, Peralillo, Marchigüe y Paredones, los que cuentan con asistencia técnica permanente de un ingeniero agrónomo de la Universidad de Chile, en el uso de tecnologías aplicadas al control de riego, entre otros.

Con la finalidad de mostrar los avances del proyecto y de capacitar a los productores, se han realizado charlas y días de campos, en las provincias de Cardenal Caro y Colchagua, donde se han tratado temas como: “Estado de avance del proyecto y datos a la fecha”, «Optimización del uso del agua de riego en arándanos», «Aspectos nutricionales para mejorar la producción y calidad de la fruta en el arándano», «Gestión del Riego con Tecnología, una herramienta para enfrentar el cambio climático», “¿Para qué y cuándo utilizar mulch en cultivos frutales?” y “Mantención y evaluación de funcionamiento de sistemas de riego”, a cargo de los académicos investigadores del proyecto, José Ignacio Covarrubias, Rodrigo Callejas, Oscar Seguel y Cristian Kremer, además del ingeniero José Ignacio Tropa, apoyo permanente de los productores en la región

Si desea recibir información de las próximas actividades del proyecto, por favor escribir a hosorio@uchile.cl