Según datos del gobierno, el déficit habitacional en la región de O’Higgins alcanza las 16.737 viviendas.
Número que está lejos de la cifra que maneja la Cámara Chilena de la Construcción. Institución que en abril pasado dio a conocer los resultados de un estudio que revelan que dicho déficit llega a las 26.018 viviendas.
A nivel nacional, estos índices aumentaron en un 35% en comparación al 2015, ascendiendo a un total de 425.660 hogares. En anteriores mediciones el déficit habitacional se mantenía o iba hacia la baja, y los datos actuales revelan que nos encontramos frente a una necesidad que va en franco aumento y de la que no es ajena la región de O’Higgins.
“Como sociedad no estamos encontrando respuestas adecuadas a un problema creciente. El sueño de la casa propia sigue siendo una aspiración central de los chilenos pero, para muchos, en especial para las familias de los sectores vulnerables, emergentes y también de grupos medios, todo indica que es un sueño que está cada vez más lejos de concretarse”, reflexionó al respecto Patricio Donoso, presidente de la CChC.
Del análisis del organismo se desprende que el alza se explica por el aumento de las familias que viven en situación de allegados, lo que es una muestra de una necesidad creciente que han mostrado estas familias y que no ha logrado ser, en buena medida, resuelto.
“Por una parte es cada vez mayor el interés de las familias por vivir en zonas céntricas, con buenos accesos y buen nivel de servicios y equipamiento. Pero, por otra, en estas mismas zonas, por restricciones que generan las propias autoridades, el precio del suelo donde construir las viviendas que podrían satisfacer esa demanda se ha multiplicado en los últimos años, con lo cual el precio de la vivienda en esos lugares también se ha elevado, muy por sobre el aumento de las remuneraciones en el mismo período”, explicó Javier Hurtado, gerente de Estudios de la CChC.
Según el último catastro de campamentos proporcionado por el Ministerio de Vivienda a comienzos del presente mes, en la región de O’Higgins existen actualmente 48 asentamientos irregulares, lo que muestra una carencia en torno a los proyectos habitacionales.
Entre las conclusiones del estudio impulsado por la CChC se encuentra el hecho de que ante la imposibilidad de conseguir viviendas en zonas centrales y con variedad de servicios, un número importante de familias opta por vivir en condiciones de allegadas en las comunas que hoy registran mayores índices de déficit habitacional.
“Hoy hay muchas personas e instituciones que, como nosotros, están preocupadas por las crecientes dificultades que están teniendo las familias para acceder a una casa propia. Este es un problema social que no se va a resolver si no tomamos medidas de fondo y actuamos con unidad”, según indicó al respecto el presidente de la CChC, Patricio Donoso.
Desde el organismo proponen una serie de medidas para contrarrestar las cifras, concluyendo que es necesaria una planificación integrada y a largo plazo para anticipar dinámicas de desarrollo urbano, así pudiendo satisfacer las necesidades de suelo para una adecuada oferta habitacional.
Por otro lado, desarrollar procesos integrales en torno a la densificación, incentivar el impulso de una política de arriendos sociales involucrando al sector público y privado, y el mejoramiento de las condiciones actuales de los barrios en el país, teniendo en consideración que hoy viven más de tres millones de personas en barrios calificados como críticos.
Por último, y de manera de resguardar a las personas en el ámbito legal, el garantizar la certeza jurídica que otorgan los anteproyectos y permisos de construcción, de modo de no generar barreras injustificadas para la oferta de nuevas viviendas.
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