El rector de Santo Tomás Rancagua, Manuel Olmos, descarta que uno de los principales efectos que acarrearía la reforma tributaria sería un menor crecimiento en el país.
Para el experto, las menores cifras se deberían a “un tema de arrastre que tiene su génesis en la desaceleración mundial por un menor crecimiento de China”.
“En el tema del menor crecimiento se conjugan varios factores. Sería un poco injusto echarle la culpa sólo a la reforma tributaria porque hay un efecto de desaceleración a nivel mundial liderados, específicamente, por un menor crecimiento de China que podría afectar a Chile por el tema de las materias primas, en el caso del cobre”, explicó Olmos.
El experto también señala que la reforma no debería significar problemas para las empresas y una mayor tasa de desempleo, pese a que aumentaría el impuesto de primera categoría de 20% a 25% en los próximos cuatro años.
«Si bien es cierto hay un aumento en el tema impositivo a las empresas (…) eso no te hace, tal vez, cerrarlas. Lo único que van a tener que hacer es ajustar y ver qué estrategia utilizar para absorber de cierta forma esta mayor tasa de impuestos”, puntualizó.
En el mismo punto suma que “habría que ver cómo traspasan los aumentos de precios al consumidor. Pero es poco probable en el corto plazo una disminución en las fuentes laborales. Lo que sí podría pasar que las empresas de grandes capitales podrían preferir otros países que le puedan entregar una mejor condición tributaria”.
El académico cree que la reforma es contradictoria en su objetivo primordial: El financiamiento de la educación, ya que la mayor parte de los 8 mil 200 millones de dólares que se espera recaudar serán utilizados en esta materia.
“El panorama no va cambiar mucho porque vas a estar subiendo los impuestos a los que ganan más, pero por otro lado les vas a estar entregando la universidad gratuita”, concluyó Manuel Olmos.