La agresión sufrida por la profesora Elena Cano Ramírez, del Liceo Trehuaco de Ñuble, a manos de un estudiante, ha generado una profunda preocupación en la comunidad educativa. Desde la Asociación de Educadores de Chile (ASEDUCH), manifestaron su inquietud ante la creciente violencia en los establecimientos y la falta de condiciones adecuadas para una verdadera inclusión escolar.
“Estas situaciones están siendo muy recurrentes y graves, y por ello, creemos que es tiempo de evaluar la implementación de las leyes que promueven la inclusión, ya que impactan globalmente al sistema educativo”, señaló Constanza Flores Adrián, presidenta regional de ASEDUCH en O’Higgins.
El gremio docente hizo un llamado a revisar el funcionamiento de normativas como el Decreto Ley 170 de la Educación Especial, el Decreto 83 de la Educación y la Ley TEA, analizando sus consecuencias en todas las comunidades educativas. “Es un paso importante para sanar a un sistema que se encuentra sobrecargado y herido por diversos factores que nos han llevado a fallar en su totalidad”, advirtió Flores Adrián.
Si bien ASEDUCH destacó los beneficios de la inclusión escolar, enfatizó que su implementación no ha considerado las realidades específicas de cada establecimiento. “Someter a todo el sistema escolar sin tener la posibilidad de ajustar los procesos de inclusión en cada establecimiento solo acrecienta la sobrecarga y el estrés de un sistema escolar que no tiene las herramientas necesarias para responder a las necesidades educativas especiales de un creciente número de alumnos”, afirmaron.
Desde la asociación también cuestionaron la reducción de las Escuelas Especiales, señalando que su desaparición ha afectado negativamente la formación de estudiantes con necesidades educativas especiales. “Las Escuelas Especiales, en extinción, eran las que preparaban de manera especial a los niños y adolescentes para una inclusión progresiva en establecimientos regulares o en la vida adulta, pero las leyes y decretos de los últimos años han fomentado un cambio radical y casi la desaparición de estas”, explicaron.
El gremio recordó otros episodios recientes de violencia en colegios, como el caso de un estudiante con Trastorno del Espectro Autista (TEA) que fue atacado en una escuela de la Región Metropolitana. “Hoy reaccionamos ante un suceso de una profesora gravemente herida, pero ayer nos dolió la noticia de un alumno TEA que fue empalado en una escuela. Estamos seguros de que es tiempo de proteger a la Educación Chilena en todas sus áreas”, expresó la dirigenta.
Finalmente, ASEDUCH llamó a las autoridades a abordar de manera urgente la revisión de estas normativas para garantizar espacios educativos seguros y libres de violencia. “Si ni siquiera llegamos a asegurar la integridad de alumnos y profesores, mañana no podremos hablar de escuela”, concluyeron.
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