La Escuela de Verano 2025, organizada por el Instituto de Formación Diocesana Padre Iván Caviedes, reunió a más de un centenar de agentes pastorales los días 7 y 8 de enero. Las actividades, desarrolladas de manera presencial en Rancagua, San Fernando y Santa Cruz, marcaron un hito al extender la formación a distintas localidades de la Diócesis de Rancagua, promoviendo una mayor participación territorial.
El evento tuvo como ejes temáticos el Jubileo 2025, el centenario de la diócesis y la sinodalidad, aspectos fundamentales para la actualización de quienes trabajan en la evangelización. Según el diácono Carlos Martínez, coordinador del instituto, esta edición fue clave para preparar a los agentes pastorales ante los desafíos de la Iglesia actual. «Los agentes pastorales deben estar actualizados para vivir y transmitir la riqueza del Año Santo y nuestro centenario», afirmó.
Formación simultánea en tres ciudades
Una de las innovaciones de esta edición fue la realización de actividades en tres sedes de manera simultánea. “Este año dimos un tremendo paso. Ya son cuatro decanatos los que reciben formación a la par, lo que permite que más hermanos puedan capacitarse juntos», señaló Martínez, destacando la relevancia de llegar a una diócesis tan extensa como la de Rancagua.
Durante las jornadas, los participantes fortalecieron su compromiso eclesial, compartieron experiencias y reforzaron los lazos comunitarios. La sinodalidad, como lo ha señalado el Papa Francisco, fue uno de los pilares de la formación. Al respecto, el coordinador explicó que este concepto busca reafirmar la corresponsabilidad de todos en la misión evangelizadora de la Iglesia.
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