De un aumento sostenido en los casos de homicidios consumados en el país dio cuenta el informe nacional entregado por el Gobierno. Según el estudio, desde 2018 a 2022 la tasa de dicho delito por cada 100 mil habitantes pasó de 4,5 a 6,7, destacando que entre 2021 y 2022 la cifra se dispara de 4,6 a 6,7, lo que en números de casos equivale un aumento de 906 a 1.322 casos.

Con respecto a la diferenciación de las víctimas por sexo, los datos de 2022 muestran que un 89% eran a hombres y 11% mujeres. En cuanto a la edad promedio de las víctimas, fue de 37,2 años. Otro dato que llamó la atención, es que el 4,1% de las víctimas eran menores de edad.
Con respecto a la diferenciación territorial, existe una marcada prevalencia de la zona norte del país. La región de Arica y Parinacota resultó con la mayor tasa de homicidios (17,1), seguida de Tarapacá (13,4) y de Antofagasta (9,4) en el tercer lugar.
En cuanto a la nacionalidad de las víctimas, la gran mayoría sigue siendo chilena, con un 82,8%. Cifra que en 2018 alcanzó un 93,4%. En relación al origen de los víctimarios, de igual forma la mayoría es de nacionalidad chilena con un 86,9% en 2022 en tanto que los victimarios extranjeros llegaron a 13,1%. Cifra que de igual manera llama la atención, considerando que en 2018 los homicidas de origen migrante llegaba solo al 3,5%.
La región de O’Higgins tiene una de las menores tasas a nivel nacional llegando al 4,4 (44 víctimas) superando solo a Aysén con un 2,8 y a Magallanes con un 2,2, sin embargo, la capital regional, Rancagua forma parte de las 27 comunas que concentran más del 50% de este tipo de delitos en el país con 18 casos en 2022.
