La Dirección Regional de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas convocó a una licitación para el proyecto “Actualización del inventario de patrimonio cultural inmueble de la región de O’Higgins”.
Según un comunicado de la seremía, esto tiene como objetivo de realizar un diagnóstico y catastro de los edificios y lugares de carácter patrimonial de la región que permitan contar con mejor información para las futuras decisiones destinadas a resguardar la identidad histórica.
«Esta investigación forma parte de un proyecto que está impulsando el MOP a nivel nacional para tener un panorama completo de las edificaciones y sitios de valor patrimonial del país, con antecedentes de su historia constructiva, materialidad, estado de conservación y ubicación georreferenciada, entre otros», refiere el comunicado.
Todo ello posibilitará que a nivel comunal, regional y nacional, se definan acciones para proteger los bienes patrimoniales que no cuentan con resguardo alguno, así como restaurar y poner en valor aquellos monumentos que requieren ser priorizados.
Para desarrollar esta investigación en la región se dispuso de un presupuesto de 276 millones de pesos. Se estima que el proceso dure 20 meses y que los resultados sean publicados en 2025.
Al respecto, la seremi María de los Ángeles Latorre, destacó que “este trabajo en nuestra región permitirá la identificación y registro de inmuebles como viviendas, estructuras industriales, asentamientos de pueblos originarios, recintos religiosos, memoriales y cementerios, entre otros, cada uno de los cuales será integrado a una geodatabase que servirá de apoyo para las decisiones de carácter patrimonial que se adoptarán en futuro”.
En tanto, Roberto Soto, director regional de Arquitectura, indicó que “en estos inventarios se efectúa un análisis histórico-territorial para identificar distintas líneas temáticas patrimoniales que contribuyen a determinar la identidad de cada región, seguido de un catálogo con fichas individuales de cada inmueble y área de valor patrimonial».
«En estas fichas se incorporan antecedentes como dirección, propietario, tipo de propiedad, protección patrimonial, uso actual, usos anteriores, materialidad, datos históricos, estado de conservación, identificación de sus valores y atributos patrimoniales, así como información complementaria respecto a si el bien cultural está ubicado en un área protegida o amenazada o si está vinculado a manifestaciones de patrimonio inmaterial, entre otras variables”, agregó.
El proceso licitatorio, que ya inició, se extenderá hasta el 10 de marzo de 2023, cuando se realice la apertura económica de las ofertas que se presenten. Si se cuenta con una propuesta que resulte conveniente para el interés fiscal, la consultoría se iniciaría durante el segundo trimestre de 2023 y culminaría a inicios de 2025.