El 28 de junio pasado, Gonzalo Baraona asumió oficialmente como alcalde de la comuna de Pumanque. Sin embargo, no pensó en la sorpresa con que se encontraría al asumir ya que como Secretario Municipal se encontró a su antecesor y quien perdió la reelección, Francisco Castro.
La situación, que parece ser una broma de mal gusto, es en realidad una jugada maestra del anterior alcalde, quien se aprovechó al parecer de un resquicio de la ley, que hoy está en Contraloría resolviéndose si ello corresponde o no.
Gonzalo Baraona, tras ganar las elecciones municipales pasadas, pensó en las preocupaciones principales de la comuna: “Pumanque tiene carencias en muchos aspectos. No tiene cajeros automáticos, no tiene liceos, no tiene Cesfam”, asevera. Pero, en vez de «preocuparme por el desarrollo de mi comuna y el bienestar de sus habitantes, debo estar con un ojo abierto al interior del propio municipio, porque hay una persona que no es de mi confianza en un cargo sensible».
Cómo ocurre la actual situación
Francisco Castro, estuvo en el cargo durante 8 años, tras haber sido Secretario Municipal del municipio. Al asumir, no llenó el cargo vacante y solo hubo reemplazos o subrogancias y con ello mantuvo la vacante de la planta por todos estos años, hasta que en las elecciones pasadas perdió ante Gonzalo Baraona y días antes de entregar el cargo, se autofirmó el decreto que lo nombraba Secretario Municipal nuevamente.
“Aquí más que nada hay poca transparencia en los actos”, agrega el actual alcalde Baraona. Él acusa a Castro de abusos en este sentido. «El 24 de mayo pasado, el ex jefe comunal estableció un decreto en el que se autodesigna Secretario Municipal con un sueldo cercano a los $2 millones (En la página de Transparencia Municipal, Francisco Arnoldo Castro Gálvez, aparece desde julio de 2021 como directivo, con el cargo de Secretario Municipal con una remuneración bruta de $3.790.476.-). Es el mejor segundo sueldo del municipio. Se comprenderá que no es personal de mi confianza ya que por sus manos pasan todos los decretos y documentos que necesitan de la firma de la Secretaría Municipal. Con él tengo cero confianza y me incomoda y me deja en una posición de inseguridad».
Ante ello, Gonzalo Baraona planteó directamente la consulta de Contraloría, «para ver la legalidad o vicios que puedan darse. Aquí también hay un tema moral y ético que él debiera reconsiderar», aseveró.
Cabe consignar que durante la gestión del anterior alcalde, hubo auditorías de Contraloría por presuntas irregularidades como la suscripción de un anexo de contrato firmado por él hacia su hermana Natalia Castro, aumentándole su remuneración por una labor que siempre fue cuestionada. También se reveló falta a la probidad durante su gestión por los permisos de circulación y finanzas obtenidos en la comuna.
Comentarios
Noticias recientes
Más Leídas