Diversos cambios ha sufrido el proceso eleccionario para elegir a alcaldes, concejales, constituyentes y gobernadores regionales a realizarse este 2021 en el país. Primero fue extendida la jornada electoral en dos días, para luego postergarlas del 10 y 11 de abril al 15 y 16 de mayo, debido a la compleja situación sanitaria por la pandemia de coronavirus.
Y los cambios podrían continuar. Según declaró la presidenta del Colegio Médico regional Santiago, Francisca Crispi, “necesitamos un plan B pues el escenario es incierto».
Aseguró que, «por ejemplo, si estamos con una ocupación del 95% de las camas UCI, la elección no se puede hacer».
La segunda ola del coronavirus ha golpeado con fuerza al país, situación graficada en los peak de contagios diarios en los primeros días de abril; una preocupante tasa de positividad y un aumento en la ocupación de camas críticas, entre otros factores que ponen en suspenso las elecciones.
“Desde el punto de vista epidemiológico, la cifras no han mejorado”, afirma Carlos Domenech, vicepresidente del Colegio Médico O’Higgins. Agrega que al 15 y 16 de mayo, “tal vez lleguemos con cifras epidemiológicas todavía con un alta ocupación de camas UCI, con alta positividad”
“A pesar de las medidas aplicadas la movilidad sigue siendo alta, hemos a llegado a disminuir en el 20 a 30% según las ciudades o regiones, pero no llegamos a una movilidad que debiera bajar sobre el 70%”, advierte el especialista.
Por lo tanto concuerda con Crispi, señalando que, “el Gobierno junto con el Congreso van a tener que evaluar un retroceso en las fechas” según evolucione la situación sanitaria.
Domenech hace el llamado a estar atentos a lo que ocurre en países que han realizado elecciones, “a pesar de cifras tan catastróficas como las nuestras”, como Perú –el fin de semana recién pasado-.
“Habría que ver que participación del padrón electoral tuvieron y ver si las próximas dos semanas siguen sufriendo con cifras altas”, esto daría luces sobre lo que podría pasar en Chile, ya que, “si tenemos ejemplos negativos en otros países, se pueden extrapolar a nuestro país; entonces podemos tomarlo como ejemplo”.
Sobre los plazos para tomar una decisión, el especialista, sostiene que sería, “con dos semanas de anticipación”.
“Eso podría ser un momento de quiebre, un punto de no retorno para decidir un cambio en la fecha, porque ahí ya se podrían establecer métodos matemáticos para realizar una proyección”, declara.
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