La sede de la Universidad de O’Higgins en Rengo comienza a tomar forma. Durante este jueves el municipio de la comuna hizo entrega oficial de los terrenos ubicados en el sector de El Naranjal para que ahí se comience a construir la anhelada Escuela de Ingeniería de la UOH.
El terreno fue entregado por la Municipalidad de Rengo a la casa de estudios regional en un comodato, con lo que la UOH tendrá la potestad para poder construir el edificio, el que se espera albergue una vez que entre en funcionamiento a alrededor de 2500 estudiantes.
Respecto a la recepción de los terrenos, el rector de la casa de estudios, Rafael Correa, valoró que “es un paso tremendamente importante, pensado desde los primeros momentos del diseño de la universidad”.
La autoridad académica recalcó que, desde el primer momento, “cuando vimos el potencial de Rengo, el entusiasmo y visión de su alcalde, pensamos seriamente que en Rengo deberíamos buscar una de las sedes de la universidad”.
“Hoy, el alcalde nos está ofreciendo un terreno que creo que es difícil superar”, agregó Correa.
En cuanto al destino de los terrenos, la máxima autoridad de la universidad estatal recalcó que “dado el potencial que tiene, hemos decidido que será para la Escuela de Ingeniería de la Universidad de O’Higgins, que la estamos pensando en grande”. “Será una escuela de Ingeniería por donde va a pasar la ingeniería nacional y latinoamericana”, añadió.
En cuanto a los plazos, si bien no adelantó una fecha concreta, Correa advirtió que el trabajo se hará “sin apresuramientos, pero sin perder ni un minuto”. Asimismo, detalló que “hemos dado los primeros pasos para el diseño del proyecto, diseño que va a demorar varios meses; y yo diría que el proyecto mismo, la construcción, la podríamos iniciar”.
“Yo veo que en 2020 se desarrolle la primera etapa de la ejecución del proyecto. Va a ser un proyecto con tres o cuatro etapas de ejecución, estamos hablando probablemente de tres o cuatro años, porque hay que recordar que estamos pensando en grande”, agregó el académico.
Una vez concluidas las obras, Correa proyectó una alta cifra de estudiantes en la sede. “Para una escuela de ingeniería moderna, grande, tener 2500 es un número perfecto, que es lo que tienen las grandes escuelas de ingeniería norteamericanas y europeas”, detalló.
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