Anita Alvarado, la llamada «Geisha Chilena» nunca ha negado su pasado como prostituta. Ha escrito un libro y siempre ha dicho que todo lo que hizo en ese periodo de su vida fue para poder mantener a sus hijos.
Anoche, en el programa de La Red, «Mentiras Verdaderas», Anita, recordó con detalles algunas de las peores situaciones que vivió mientras ejercía la prostitución en Japón y lo difícil que fue para ella enfrentar por ejemplo, ver y practicar sexo en vivo en teatros.“De verdad que uno pierde el miedo, pierdes la sensibilidad, ya no te importa”, relató entre lágrimas, agregando que,“pierdes inocencia, pierdes calidad de vida. Por eso cuando pasa el tiempo digo ‘no’, si fui puta fui puta yo, no mis hijos, nunca, ninguno de mis hijos se me va a perder si yo estoy viva, ninguno. Ni drogas, ni prostitución, porque el día que pase eso me voy a sentir fracasada como mujer, como madre”, expresó con convicción.
Sobre las condiciones en las que vivía en el país asiático, señaló que compartía un departamento con otras 37 mujeres, aunque nunca estaban todas ahí al mismo tiempo, ya que, se movilizaban constantemente a otras ciudades.
Sobre cual fue la peor situación que vivió siendo prostituta, relató una impactante experiencia, «la asquerosidad fuerte que escuché fue ‘¿me puedes hacer caca en el pecho?’ y yo ‘¿cómo?’ y estábamos en un local en ropa interior todas las mujeres y había unos cuartitos, era como ‘¡no! ¿me estás hueveando? ¿cómo te voy a hacer caca en el pecho?”, narró, agregando que,“más encima para arreglarla y no ser tan cruel, le dije ‘si ni siquiera tengo ganas de hacer’ y él me dijo ‘con esta pastillita haces al tiro».
Anita Alvaro repitió durante la entrevista que todo lo que hizo, todas las humillaciones que aguantó fue por el bienestar de sus hijos, ya que desde Japón podía mandarles dinero.
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