El 31 de agosto del año 2011 cuatro personas fueron asesinadas en la localidad de Tipaume, en Rengo, siendo el único acusado en la causa Jaime Ibáñez, yerno y cuñado de las víctimas. Pese a que el hombre fue llevado a la cárcel de Rancagua, se suicidó la noche antes de concurrir a su juicio oral en 2014.
En su encierro, Jaime Ibáñez confió su historia a un reo, Claudio Celis, autor de del libro “Tierra Sangre”, donde compiló los relatos y los mezcló con la ficción y la cruda realidad de la vida carcelaria para dar cuerpo a su segunda novela.
“Toda semejanza con la realidad es real semejanza, los personajes de esta novela son imaginados con eco existencial… En este libro el lector encontrará una historia policial donde se puede convertir en investigador, descubriendo pistas que le permitirán desentrañar un puzzle investigativo que nunca fue resuelto”, manifestó Claudio Celis, autor de Tierra Sangre.
Jaime Ibáñez se suicidó en su celda un día antes del juicio por el cuádruple homicidio de Salvatore Piombino, su mujer Senta Wachholtz y sus hijas Patricia y Carla. El proceso había sido postergado en tres ocasiones por diversas razones, en la última, el imputado había declarado que no tenía la confianza suficiente en su defensor para enfrentar el juicio.