Francisco Butrón compró el inmueble y luego lo acondicionó con más pisos.
Hasta ahora no existe un estudio fidedigno del origen de la Casa Butrón y son los vecinos de la población Centenario los encargados de entregar los antecedentes del origen de la casona que data de fines del siglo XIX y que, según la comunidad, entre 1903 y 1904 habría sido construido el inmueble con un solo piso.
“Se contó muchas veces que aquí el señor butrón, cuando estaba en todo su apogeo de las viñas tuvo una mala racha, quebró y aparentemente habría hechos un pacto con el diablo y en base a eso se creó un montón de mitos” relató el presidente del consejo de Diseño y Desarrollo de la población Centenario, Juan Pablo Cornejo.
Francisco Butrón llegó desde España para asentarse en la Región e instalar en el Valle de Rapel sus terrenos para dedicarse a la vitivinicultura. Más tarde, en 1930, llegó hasta el sitio donde se emplazaba la casa patronal, oportunidad en que construyeron el segundo y tercer piso, y ya en 1940 construyeron la cúpula que se ve hasta hoy en día.
Continuando con su relato, Cornejo manifestó que “la historia también relata que la señora de Butrón, tras hacer el pacto con el diablo hicieron una iglesia para el barrio y así remediar el pacto y el daño que hicieron. De hechos decían que ella iba con un velo para no ver al diablo en su cara. Son historias que uno escucha y después comparte”.
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