En la Región de O’Higgins, la agricultura familiar campesina representa un componente esencial de la identidad y la economía local, con más de 15 mil familias que dependen de ella. Con esfuerzo y conocimiento transmitido entre generaciones, mantienen viva la tradición alimentaria del territorio, aportando a la seguridad alimentaria de O’Higgins y del país.
Hoy, el cambio climático representa un gran desafío para este sector, al enfrentar nuevas plagas, la reducción en la disponibilidad de agua y eventos climáticos inesperados como heladas, inundaciones o sequías prolongadas, que afectan directamente la economía y calidad de vida de muchas familias.
Frente a este escenario, la innovación constituye una oportunidad para diversificar la producción, articulando el conocimiento científico y tecnológico con la historia, la cultura y el trabajo que dan origen a cada producto local, impulsando así un desarrollo sostenible para la región.
En esta línea, la Universidad de O’Higgins, a través del Instituto de Ciencias Agroalimentarias, Animales y Ambientales (ICA3), con financiamiento del Gobierno Regional y el apoyo de múltiples actores públicos y privados, impulsa iniciativas que ponen la I+D al servicio del territorio. Tal es el caso de la “Cámara de Simulación Agroclimática”, liderada por la Dra. Catalina Pinto, que permite anticipar y mitigar los impactos del cambio climático en cultivos regionales, mediante el control y análisis de temperatura, humedad y radiación.
Otro ejemplo es el “Programa para la Adaptación de la Apicultura al Cambio Climático”, dirigido por la Dra. Andrea Müller, que acompaña en la adopción de tecnologías y prácticas sostenibles, fortaleciendo una actividad clave para la polinización, la biodiversidad y la seguridad alimentaria.
Y las iniciativas “La Despensa de O’Higgins”, de la Dra. Karen Mesa, y el “Sello RRA”, de la Dra. Claudia Foerster, que integran ciencia, innovación y cultura alimentaria, promoviendo productos con identidad, sostenibilidad y trazabilidad e inocuidad alimentaria.
Estos proyectos reflejan una manera distinta de conectar la academia con el emprendimiento local, incorporando identidad y sentido de pertenencia al territorio, y apostando por un desarrollo sustentable y justo.