En una llamada telefónica mantenida este miércoles, el papa León XIV solicitó al presidente ruso Vladimir Putin que hiciera un “gesto a favor de la paz” en el marco de la guerra en Ucrania. La conversación, confirmada por la Santa Sede y el Kremlin, marcó el primer contacto directo entre ambos líderes desde que León XIV asumió el pontificado.
Durante la conversación, el Papa enfatizó “la importancia del diálogo para la realización de contactos positivos entre las partes y buscar soluciones al conflicto”, según indicó el Vaticano en un comunicado oficial. En respuesta, Putin reafirmó su disposición a alcanzar una solución pacífica por vías diplomáticas y políticas, un mensaje que ha reiterado desde el inicio de la invasión a Ucrania en febrero de 2022.
El Kremlin informó que el mandatario ruso aprovechó el intercambio para compartir detalles sobre la segunda ronda de negociaciones celebrada en Estambul. Asimismo, expresó su agradecimiento al Papa por su disposición a colaborar en la resolución de la crisis, y manifestó su expectativa de que el Vaticano tenga un papel más activo en la defensa de la libertad religiosa en Ucrania.
No obstante, Putin mantuvo un tono crítico hacia Kiev, al denunciar ataques contra infraestructuras civiles rusas, los cuales calificó como actos de terrorismo. “El ataque selectivo contra civiles por parte de Ucrania es claramente catalogado como terrorismo bajo derecho internacional”, afirmó el mandatario, según el comunicado del Kremlin.
El papa León XIV también expresó su interés en facilitar futuras conversaciones de paz y ofreció al Vaticano como posible sede de las mismas. Esta iniciativa ha sido respaldada por el expresidente estadounidense Donald Trump y confirmada por el gobierno italiano, lo que subraya la relevancia del rol de la Santa Sede en los esfuerzos internacionales por poner fin a la guerra.
Además del conflicto ucraniano, ambos líderes discutieron la cooperación cultural y humanitaria, enfocándose en la protección de los cristianos y los lugares sagrados, especialmente en Medio Oriente. Putin, por petición del patriarca Kiril, transmitió sus mejores deseos al pontífice y destacó la necesidad de trabajar juntos hacia un “orden mundial más justo y equitativo”.
La conversación concluyó con el compromiso mutuo de mantener el contacto, lo que abre una vía de comunicación directa en medio de un escenario internacional complejo.
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