La medida fue adoptada tras constatarse irregularidades en ambos recintos. En el centro de rehabilitación de Requínoa, la prohibición se produjo debido a deficiencias estructurales y de seguridad, como malas condiciones de habitabilidad, problemas en la cocina y hacinamientos. Además, recientemente se registró una explosión provocada por un aerosol que dejó como saldo a dos personas con quemaduras de primer y segundo grado y la rotura total de los vidrios del establecimiento.
Por otro lado, el centro ubicado en Rengo fue sancionado por no contar con la autorización sanitaria correspondiente, aunque se constató que cumplía con las condiciones técnicas y de habitabilidad necesarias, sin representar un riesgo directo para la salud de las personas.
Al respecto, la titular de la cartera regional de Salud, Carolina Torres Pinto, señaló que “tenemos la prohibición de dos establecimientos para tratamiento de adicciones, una en la comuna de Requínoa, en donde se generaron la identificación de varias falencias relacionadas a problemas con la cocina, además aquí hubo una explosión asociada a aerosoles y al uso de calefacción. Todo esto hace que se inicie un sumario. Esta institución tiene autorización sanitaria, pero debe subsanar todas estas observaciones para poder tener continuidad en sus funciones”.
Respecto del centro de rehabilitación ubicado en Rengo, explicó que “está con prohibición, porque tiene un incumplimiento administrativo dado que no tiene la autorización sanitaria, sin embargo, las condiciones no exponen a riesgo de la salud a las personas que están en esta institución”.
Ambas fiscalizaciones se realizaron por parte de los Departamentos de Acción Sanitaria y Salud Pública de la Seremi de Salud de la Región de O’Higgins.
La Autoridad Sanitaria enfatizó que este tipo de acciones continuarán desarrollándose en distintos puntos de la región, con el objetivo de asegurar el cumplimiento de la normativa y proteger la salud de la población.