Frente a las altas temperaturas, los expertos enfatizan la relevancia de mantener un ambiente fresco y estable en el hogar para proteger a las mascotas. Bajo este contexto, los aires acondicionados se han posicionado como una de las alternativas más utilizadas por los dueños para garantizar el bienestar de sus animales dentro de casa.
En este sentido, el académico de Medicina Veterinaria de la Universidad San Sebastián (USS), René Alegría destaca que “el aire acondicionado puede ayudar a regular la temperatura y humedad en el ambiente, lo cual es beneficioso para mascotas mayores o con condiciones médicas, como problemas respiratorios o cardíacos”.
En los días más calurosos del verano, algunas razas de perros son más vulnerables a sufrir complicaciones debido a sus características físicas. Esto se debe a que, en su mayoría, no pueden regular la temperatura de su cuerpo tan eficientemente como otras razas.
¿Qué razas son las más afectadas?
Razas braquicefálicas: Perros como Bulldogs, Pugs y Shih Tzus tienen caras planas y narices cortas, lo que les dificulta regular su temperatura corporal a través del jadeo, dejándolos más susceptibles al calor.
Razas grandes: Perros como el San Bernardo y el Gran Danés, por su tamaño, tienden a acumular más calor rápidamente. Esto les hace más propensos al sobrecalentamiento, ya que tienen menos capacidad para disipar el calor.
Razas de pelaje grueso: Perros como el Husky Siberiano, el Malamute y el Samoyedo tienen pelajes densos y de doble capa, diseñados para climas fríos. Aunque este tipo de pelaje los protege en invierno, en ambientes cálidos puede convertirse en un verdadero desafío para su bienestar.
Estas razas, así como perros mayores, obesos o con problemas respiratorios, requieren especial atención durante los días calurosos. Es fundamental evitar que se expongan demasiado al sol y mantener un ambiente fresco que les permita estar cómodos y saludables.
Por su parte, Pierre Dréano, jefe de productos HVAC en Midea Carrier Chile, recomienda mantener una temperatura entre 22°C y 26°C dentro de casa. Además, subraya la importancia de evitar diferencias extremas entre la temperatura interior y la exterior, ya que esto podría resultar perjudicial para los animales.
Así que, si tienes una mascota que forma parte de alguna de estas razas más vulnerables al calor, asegúrate de que tu hogar se mantenga a una temperatura agradable y constante, al igual que mantenerlos hidratados.