Con la llegada del verano, las playas chilenas se llenan de turistas y bañistas, lo que también incrementa los riesgos asociados con especies marinas peligrosas. Entre ellas, la fragata portuguesa (Physalia physalis), un organismo flotante altamente venenoso, ha comenzado a ser más frecuente en nuestras costas, representando una amenaza para los bañistas desprevenidos.
A pesar de la confusión que genera con las medusas, la fragata portuguesa no es una medusa, sino un hidrozoo flotante. Este animal marino es una colonia de organismos que funcionan de manera colectiva, con un flotador en forma de burbuja alargada que le permite desplazarse por la superficie del agua, impulsada por el viento y las corrientes marinas.
Características y riesgos de la fragata portuguesa
Los tentáculos de la fragata portuguesa pueden alcanzar varios metros de longitud y contienen un veneno extremadamente tóxico, capaz de causar reacciones graves en los seres humanos. Su picadura puede provocar desde intensos dolores y quemaduras en la piel, hasta reacciones alérgicas severas que, en casos extremos, pueden resultar fatales.
Aunque originalmente se encuentra en aguas cálidas del Caribe y el Atlántico, desde 2014 se han registrado avistamientos de esta especie en las costas chilenas, desde Arica hasta Puerto Montt, e incluso en Rapa Nui.
¿Cómo identificarla y qué hacer en caso de picadura?
La fragata portuguesa se reconoce fácilmente por su flotador azul o morado, con una forma alargada que recuerda a una vela. Sus tentáculos, que cuelgan de su cuerpo, son largos y pueden extenderse varios metros en el agua.
Si eres picado por una fragata portuguesa, es crucial mantener la calma. La primera recomendación es evitar frotar la zona afectada, ya que esto puede empeorar la irritación.
El veneno de los tentáculos provoca un dolor intenso, similar a una quemadura, acompañado de enrojecimiento. Según información proporcionada por el Gobierno de Chile, estos son los pasos que debes tener en cuenta para minimizar el daño:
1. Lava la zona afectada con agua de mar: Esto ayuda a retirar los restos de tentáculos sin empeorar la lesión. No aplicar agua dulce ni frotar o rascar la piel con arena o toallas.
2. Retira los tentáculos sin tocarlos directamente: Usa una tarjeta de plástico o un objeto similar. Nunca uses las manos desnudas.
3. Aplica vinagre blanco doméstico: Si dispones de él, sumerge la lesión entre 15 y 30 minutos o aplícalo directamente.
4. Evita remedios caseros contraproducentes: No uses agua dulce, alcohol, orina, jugo de limón, bicarbonato de sodio o protector solar. Estos productos pueden agravar la picadura.
5. Consulta a un médico si los síntomas persisten: Si el dolor o la inflamación no disminuyen, acude de inmediato a un centro de salud.
Si ves una fragata portuguesa en el mar, no te bañes ni realices actividades acuáticas. Incluso muertas, siguen siendo peligrosas. Evita tocarlas, tanto en el agua como en la arena, y usa calzado para proteger tus pies al caminar por la playa. Mantén tu distancia y cuida tu salud.
Para denunciar la presencia de fragata portuguesa lo puedes hacer al 137 de la Armadas de Chile o a Salud Responde al 600 360 7777, donde también puedes resolver dudas o consultas.
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