Por momentos, la emoción contenida parece que será capaz de aflorar incontrolable, sin embargo, el temple de Helia Martínez impresiona. Es capaz de relatar cómo su marido ha tratado de asesinarla en tres ocasiones, sin perder la calma, no como una muestra de frialdad, sino de una fuerza sobrecogedora; y mientras sus ojos brillan ante las cámaras y se clavan en un lugar distante, o en alguien en su mente, sus palabras resuenan ante el silencio de una sociedad indolente e injusta que simplemente no ha sido capaz de protegerla.
“El mensaje que entrega la justicia es que si hablas te van a matar, porque no te vamos ayudar”. Es la dura sentencia de una mujer decepcionada de una justicia que no ha sido capaz de cumplir su rol, ni entregar certezas. En el último episodio vivido por Helia, su marido, el médico traumatólogo Diego Manzur quién en noviembre de 2023 ya había sido formalizado por femicidio frustrado y quien había conseguido su libertad por un tecnicismo jurídico, pocos días atrás, aprovechó ese cambio de cautelar para intentar incendiar el local de su mujer, la víctima, siendo detenido en lugar por la policía.
Sin embargo, el tribunal de San Fernando, que lo formalizó por tres delitos (desacato, robo en lugar no habitado e intento de incendio), dejó al galeno solo con arresto domiciliario en la comuna de Vitacura en Santiago y prohibición de entrar a la comuna de San Fernando, además de la prohibición acercarse a la víctima su lugar de trabajo. Extrañamente, no se consideró el contexto de femicidio frustrado previo para una cautelar de prisión preventiva.
La historia, que parece extraída de un guion cinematográfico, tiene detalles escalofriantes, “él robó el centro médico y eso se acreditó en la audiencia, rompió las puertas se llevó especies y después él, con ayuda de un cómplice, se sube a un Jeep color gris del que sale con un bidón de 20 litros de combustible diésel y se devuelve al centro médico; ya estábamos adentro con el administrador cuando lo ve carabineros, trata de deshacerse del bidón y es detenido, pero llevaba un traje táctico, todo de negro con una pistola de aire comprimido de 68 milímetros, guantes como de policía, encapuchado, hay una premeditación de querer hacer daño, de querer quemar, de querer matar” relata Helia, quien agrega que “me tiene consternada que esté con arresto domiciliario en la casa de su mamá, eso para mí es insólito porque acá sí hay un peligro para la sociedad, no solo me iba a quemar yo sino que se iba a quemar toda la cuadra”.
Los intentos anteriores
Pero, aunque es el más reciente, no es el único terrorífico evento que Helia ha debido vivir. Tras casi 7 años de matrimonio, aunque separada de hecho por la constante violencia, los tres hijos de Helia han estado al margen de la historia para protegerlos, aunque advierte que “ellos han estado en constante vulneración de Derechos por parte de su padre y la familia de éste, porque esto ha sido una guerra constante contra mí”, ya en 2019, con solo dos años de matrimonio Helia relata “sufrí el primer femicidio frustrado, que fue por asfixia”, y continúa señalando que “hubo denuncias, pero yo no seguía adelante, por los niños, le ofrecí que se hiciera un tratamiento, que fuéramos a terapia, pero él nunca tuvo conciencia de su enfermedad”.
Lo que relata Helia es una guerrilla de denuncias y violencia, que fueron recrudeciendo, hasta el segundo femicidio frustrado a finales de 2023 que desencadenó la detención de Manzur y la atención mediática del caso, pero lo que preocupa realmente es la triste similitud del caso con otros, “él tiene 39 desacatos, es decir, 39 veces incumplió las órdenes de alejamiento y contacto, me mandaba hasta 100 mensajes al día, y después de tres femicidios frustrados en mi contra, está acostado con un calientacamas viendo Netflix con su mamá” cuenta Helia, quien agrega que, “hay más formas de violencia, él ha declarado que gana más de $13 millones al mes, sin embargo, desde que estamos separados no ha sido capaz de darme un peso como pensión o para nuestros hijos”.
Helia señala además que “ha mostrado su influencia, su poder, ha cambiado de abogado, ha contratado buenos abogados que son costosos y que muestran que el interés está en protegerse, en él, pero lo relevante son los niños y también la vida no solo mía sino de todos los que están alrededor”.
Ante este escenario la reflexión de una mujer valiente es lapidaria “creo que la justicia es indolente, es lenta, no tiene perspectiva de género y creo que muchas mujeres están viviendo lo que yo estoy viviendo,si vemos la estadística dice que una mujer al día sufre un femicidio frustrado, los números son alarmantes” y agrega que “hay indolencia respecto de lo que viven las mujeres y hay una hipocresía, veo montones de mujeres que andan con pañuelos pañuelo color lila pero a la hora de ayudar son las primeras que ayudan al victimario vamos a ver qué hizo ella dicen, es que a lo mejor ella fue infiel comentan, entonces justifican que alguien te pueda matar”.
El apoyo de la senadora Sepúlveda
Helia sostuvo una reunión con el fiscal regional de O’Higgins, Aquiles Cubillos a instancias de la senadora Alejandra Sepúlveda, legisladora para quien tuvo sentidas palabras “no fue la senadora la única que a la que yo recurrí y le pedí ayuda, fueron a muchos políticos a los que les escribí y les pedí ayuda y fue solo la senadora la que ha tenido la ganas de ayudar, porque la verdad es que es un cacho ayudar en familia, entonces quiero decir también que no es menor lo que está haciendo ella, y que de verdad refleja su compromiso, su trabajo, y no tiene que ver con una cosa política acá tiene que ver realmente con querer ayudar a otro”. Sobre la reunión Helia señaló que “creo que entienden, que saben cuáles son las lagunas y creo que también entienden que se están enfrentando a una persona que es un médico importante, con influencia, con dinero, con inteligencia”.
Finalmente, Helia reflexionó “esto ha sido como estar en una guerra constante con ataque tras ataque y uno tratando de levantarse para ver qué ataque más viene, pero hoy día también siento que es muy necesario poder visibilizar lo que está corriendo y también que la gente nos pueda dar apoyo” y agregó, apelando a la justicia que “yo esperaría que no se alejen del sentido común y no ser indolentes con una vida más. porque las vidas de las mujeres no son sólo un número, son montones de personas que están detrás a las que no les creen y además se le entrega un mensaje súper doloroso a todas las mujeres que están sufriendo violencia intrafamiliar que es ‘Quédate callada que nadie te va ayudar’”.
Consultada por El Tipógrafo la legisladora expresó que “una de las complicaciones más graves que tenemos en el país, y lamentablemente en nuestra región de O’Higgins, es la violencia intrafamiliar. Y como además ha ido creciendo y complicando aún más los femicidios y los femicidios frustrados. Tenemos en nuestra región dos casos, que son emblemáticos, dolorosos, de femicidios frustrados, como es el de Ingrid y el de Helia. Es por eso que nosotros visitamos al fiscal regional, quien es una persona sin duda comprometida con el tema, así lo manifestó. Y lo que hemos pedido es poder acelerar los procesos y resguardar a las víctimas. Nos complica que las medidas cautelares no se estén cumpliendo y que al final la única persona que es perjudicada es la víctima, es la mujer. Por eso además estamos pidiendo ahora una reunión con el Ministro de Justicia para ver cómo incorporamos y fortalecemos las medidas cautelares. Tenemos una moción parlamentaria ahí que nos gustaría que el Ejecutivo pudiera patrocinar. Pero lo más importante hoy es cómo resguardamos a las mujeres que sufren de violencia intrafamiliar permanente continuamente pero además que han hecho uso de todo el procedimiento, de denuncia, de medidas cautelares, etc. Así que estamos solicitando a toda la institucionalidad que tiene que ver con este tema tan doloroso y tan dramático para nuestra región que puedan actuar aceleradamente, rigurosamente y con toda la fuerza de la ley”.