“Remita a esta Cámara los antecedentes sobre los cuales se sustenta la convocatoria para el día 4 de enero de 2024, de reunión de la Comisión de Régimen Interno, sin haber sesionado la Comisión Conjunta ad hoc acordada el 26 de abril de 2023 y sin la totalidad de los veinte miembros del Consejo Regional, dada la no provisión de tres de sus escaños por parte del Tribunal Electoral Regional de O’Higgins”, así reza el oficio dirigido al gobernador regional de O’Higgins, Pablo Silva Amaya y que solicita antecedentes sobre la nueva polémica que sacude al gobierno regional, firmado por diputados del Partido Republicano.
¿Por qué no se han reemplazado los consejeros renunciados?
Recordemos que en octubre de 2023, Yamil Ethit, Juan Pablo Díaz y Edinson Toro renunciaron al Consejo Regional para postular a las alcaldías de Santa Cruz, Graneros y San Vicente respectivamente, hasta ahí todo claro, sin embargo, la Ley dispone que sus escaños deben ser ocupados por otros candidatos de las listas en que competían los renunciados, y ahí está el problema. Diversas presentaciones y pronunciamientos del SERVEL, mantienen en suspenso el procedimiento.
La razón es difusa, y más allá de tecnicismos jurídicos, llama la atención que O’Higgins sea la única región en que este proceso aún no acaba, pese a que en prácticamente todas las demás regiones se produjeron renuncias de la misma naturaleza.
Definición de presidencias de comisiones
Pero lo verdaderamente complejo es que se pretenda definir las presidencias de las comisiones en que se divide el Consejo con tres integrantes menos, lo que significa alterar gravemente los equilibrios políticos que determinaron las urnas al momento de la elección, y sería la motivación de los parlamentarios para requerir la información del gobernador mediante el oficio citado.
La sesión está citada para mañana jueves a las 9:30 horas y el problema podría ser una más de las incongruencias del proceso de descentralización y las facultades y obligaciones del gobierno regional.

El consejero republicano Lenin Arroyo, que presentó además una denuncia en el gobierno regional explica que «se constituyó una comisión ad-hoc para revisar la composición y trabajo de las comisiones al interior del consejo y esta no ha sesionado ni evacuado un informe» y agrega que «ahora se pretende votar las presidencias y vicepresidencias de las comisiones que negociaron entre cuatro paredes un grupo de consejeros en un restaurante de Rancagua apurados, antes que asuman los tres reemplazantes de los consejeros que renunciaron en octubre, es un verdadero portonazo a cara descubierta a la democracia, quieren meter la mano a la urna y yo no me voy a prestar para ese juego».
