Para conocer y entender que fue lo que aconteció, conversamos con Alejandra Serey, quien es Doctora en ciencias mención geología e investigadora post doctoral del instituto de ciencias de la ingeniería de la UOH, quien indicó que “entendamos que la minería puede ser a rajo abierto o subterránea. Y la ley ha hecho que cada vez la minería subterránea vaya mucho más en profundidad. Y la dinámica de la roca va cambiando a lo largo de que se va sacando el mineral, entonces los esfuerzos se van configurando a medida que se va sacando mucho material. Entonces no es algo estático, es algo dinámico, a medida que es más profundo, mayores son los esfuerzos. Los estallidos de roca se generan por este cambio dinámico en los esfuerzos y generan sismicidad, ésta provoca estallido de roca y esto último generó el desastre que vimos este lunes”.
Alejandra Serey agregó que “en nuestro país tenemos muchos tipos de sismicidad, tenemos la sismicidad asociada con la subducción, y también sismicidad cortical superficial. Por ejemplo, la falla de San Ramón que es más común en Santiago, pero se genera a una profundidad superficial de nueve a siete kilómetros. Y en el caso de ahora, que fue magnitud 3.9, pero a una profundidad muy baja de siete kilómetros, entonces la intensidad, o cómo lo percibimos en la superficie, es mucho más intenso que un terremoto de subducción que es a mayor profundidad, y ahí la diferencia entre epicentro e hipocentro”.
Respecto a la construcción de la mina, y los protocolos antisísmicos, Alejandra Serey fue enfática en precisar que “entre el 2000 y el 2016, fallecieron 169 trabajadores en Chile, por estallidos de roca. Siendo la principal causa de muerte accidental en la minería”. Y agregó que “la ley antisísmica se generó a partir del terremoto de 1985”, explicando que somos reactivos ante los desastres y no preventivos, aunque como país respondemos muy bien ante la emergencia.
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