Ya estaba rigiendo el toque de queda a las 21 horas del domingo, cuando los vecinos de calle Bernardo O’Higgins con Errázuriz, en Rengo, sintieron un estruendo sin tener claro lo que sucedía. Hasta el lugar llegó Carabineros de la 4ª Comisaría de la comuna, donde se ubica la Iglesia Basílica y Parroquia Santa Ana de Rengo, y se percataron que una camioneta Toyota Hilux, había destrozado la reja de protección y se había estrellado contra las puertas centrales del recinto, forzándolas de par en par.
El chofer del vehículo patente RW-7678, identificado con las iniciales R.P.S., indicó a la autoridad policial en forma inmediata que su acción fue planificada y con la clara intención de chocar la Iglesia Católica. Al sujeto, aunque sin signos de haber bebido, se le practicó como corresponde la prueba de hálito alcohólico y luego la fiscal de turno, Marcia Allende, instruyó para que se le practicara la Alcoholemia. Tras tomar contacto con familiares, se estableció que el ahora imputado estaba bajo tratamiento de salud mental. Por esta razón, la fiscal dispuso su libertad y quedó apercibido por el Art. 26 del Código Procesal Penal.
