La alimentación es clave para mantener un corazón sano, ya que las dietas poco balanceadas y ricas en grasas, sodio, carbohidratos y azúcar provocan un aumento de peso que puede involucrar el padecimiento de otras enfermedades que afectan directamente la salud cardiovascular. La obesidad, por ejemplo, puede generar diabetes, hiperlipidemia e hipertensión. Estos tres son factores de riesgo conocidos y muy importantes en la generación de una enfermedad cardiovascular.
Según el estudio «Radiografía de la Obesidad en Chile», el 34,4% de los chilenos padece de obesidad, sin considerar el sobrepeso, situación que se concentra en las regiones con menos ingresos económicos. En este sentido, Chile es el segundo país de la OCDE con mayores índices de obesidad (34,4%), solo superado por Estados Unidos (40%).
Según el cirujano cardíaco y jefe de cardiología, cirugía cardíaca y unidad coronaria de Clínica RedSalud Santiago, Carlos Orfali, “la obesidad puede producir elevación de la presión arterial, aumento de la resistencia a la insulina, desarrollo de diabetes, subir el colesterol y provocar sedentarismo. Todo lo anterior, puede elevar el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares”.
En este marco, el especialista entrega algunas recomendaciones para mantener una dieta sana y equilibrada en el mes del corazón:
La importancia del consumo de frutas y verduras para tener una dieta equilibrada
Ciertos alimentos han superado la prueba del tiempo y se ha considerado que son saludables para el corazón en todas las ediciones de guías y recomendaciones alimentarias. Esta breve relación incluye frutas, verduras y cereales integrales. Otro tipo de alimentos que actualmente se pueden considerar saludables, son: el aceite de oliva, el pescado y los frutos secos, entre otros.
Orfali explica que “las frutas y verduras se han considerado siempre alimentos que fomentan la buena salud. Esto se debe a la asociación existente entre el mayor consumo de estos productos y la reducción del riesgo de sufrir enfermedades crónicas. En consecuencia, las guías alimentarias actuales recomiendan aumentar el consumo de frutas y verduras hasta en cinco raciones al día”.
Alimentos clave:
- Nueces.Alimento “ideal” para prevenir y cuidar problemas cardiovasculares gracias a sus altos niveles de ácidos grasos Omega-3, que protegen el corazón.
- Brócoli.Contiene ácido fólico, zinc, hierro, calcio, vitamina K, antioxidantes. Además, es un alimento que ayuda a reducir el riesgo de accidentes vasculares.
- Chocolate negro.Ayuda a restaurar la flexibilidad de las arterias y evita que los leucocitos se peguen a las paredes de los vasos sanguíneos.
- Fresas? (Frutillas). Contienen flavonoides, que contribuyen a dilatar las arterias, protegen el endotelio (la capa interior de los vasos sanguíneos) y controlan la tensión arterial.
- Curry.La curcumina, un antioxidante presente en este condimento, reduce las probabilidades de sufrir insuficiencia cardíaca e hipertensión por sus propiedades antiinflamatorias.
- Té verde. Una o dos tazas al día contribuyen a prevenir enfermedades cardiovasculares, ya que ayudan a disminuir los niveles altos de grasa en la sangre.
- Aceite de oliva.La ingesta diaria de aceite de oliva ayuda a proteger la salud cardiovascular gracias a su composición en ácidos grasos y por sus antioxidantes.
- Salmón.Ayuda a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos e incrementa la fluidez de la sangre, al mejorarse la elasticidad de las paredes arteriales.
- Vino tinto.El etanol y los polifenoles tienen efectos beneficiosos sobre las moléculas inflamatorias causantes de la ateroesclerosis.
- Legumbres.Sus proteínas de excelente calidad y su poca grasa, favorecen un nivel saludable de colesterol en la sangre.