Este lunes se llevará a cabo el anunciado paro nacional indefinido convocado por el Colegio de Profesores, debido a la insuficiente respuesta del Ministerio de Educación y del Ejecutivo tras más de un año de negociaciones infructuosas.
Según el presidente regional del Magisterio, Roberto Villagra, se trata de demandas justas, que exigen justicia social para poder desarrollar de la mejor manera posible el proceso de aprendizaje. “Aquí no se está pidiendo un solo peso, no se están pidiendo reajustes de sueldos ni que se amplíe el presupuesto nacional, entendiendo la base de que hay que poder hacer una distribución justa de los derechos de los profesores, con beneficios también para las comunidades educativas”, reflexiona al respecto.
El representante critica la indiferencia y la demora que ha mostrado el gobierno frente a las exigencias, entre las que se cuentan estabilidad laboral, fin a la doble evaluación del desempeño profesional, término del agobio laboral, igualdad de derechos en todo el Magisterio, fin a la interminable espera en la entrega de bonos de incentivo a profesores en edad de jubilar, y la titularidad de las horas contratadas, son algunas de las principales demandas. “Es algo que los profesores de verdad no quisiéramos hacer, porque tenemos un fuerte compromiso con la educación pública, y lo que ocurra desde hoy es responsabilidad del gobierno, específicamente del Ministerio de Educación”, asegura Villagra.
De acuerdo a la autoridad docente, todas las comunas de la región han confirmado, de una u otra manera, su participación en el paro indefinido. “La seguridad que puede tener la opinión pública y, por tanto, el gobierno, es que los profesores de Chile se van a movilizar a lo largo de todo el territorio. En el caso de nuestra región, ninguna comuna rechazó el paro, frente a lo cual tenemos programado un calendario de actividades para la semana. El día viernes nos reuniremos para hacer una evaluación de las movilizaciones”, adelanta el dirigente.
En cuanto a los beneficios que entregan a diario los establecimientos a sus alumnos, explica que en la mayor parte de la región, directores y profesores (adherentes al paro) realizarán turnos éticos para así poder asegurar la alimentación de sus estudiantes, además de la posibilidad de ser atendidos por los asistentes educacionales de cada colegio, esto último según defina cada director.
“El paro no es contra la familia ni los estudiantes, el paro es en contra de las políticas dilatorias del gobierno, pues se trata de una falta de respeto muy grande para el Magisterio. De verdad hemos buscado tener las mejores relaciones posibles con el fin de conseguir un cambio efectivo para todos, y nuestra posición es unirnos para lograr que las movilizaciones efectivamente no sean tan extensas, y eso se consigue con fuerza y unidad”, finaliza el dirigente.
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