Según estudios de Euromonitor Internacional más del 34% de la población chilena invierte en soluciones naturales en búsqueda de una mejora a largo plazo de sus problemas médicos. De igual manera, Chile se ubica a nivel mundial en el puesto 36 de la lista de países que optan por estas alternativas más tradicionales.
“En esta fecha se conmemora el Día Internacional de la Medicina Tradicional de cada país y por ende, es diferente según su procedencia; en el caso de Chile es el reconocimiento de la herbolaria mapuche y sus ritos de sanación, que es la más usada y que actualmente se aplica a nivel de salud primaria en los Cesfam de la Araucanía mayormente”, explicó la especialista químico farmaceuta de Farmacias Knop, María Elena Rudolphi.
Hoy en día en muchos países desarrollados, entre el 70% y 80% de la población, ha recurrido en alguna oportunidad a métodos alternativos o complementarios, según estudios de la OMS. Lo anterior porque resaltan de manera sustancial los beneficios otorgados por este tipo de medicina, pues ofrece mejoras en la calidad de vida de las personas que se suman a probar técnicas o elementos naturales.
Cabe consignar que la medicina natural estudia, investiga y experimenta elementos que son brindados por la naturaleza. Esta medicina se relaciona mayormente con minerales, plantas, hierbas, frutas, raíces y otros elementos cataplasmas, productos creados por las abejas que se preparan para ser utilizados en forma directa o de alguna manera formulada.
“En Chile se le conoce como medicina complementaria, definida así por no pertenecer al sistema oficial de salud reconocido y por ser foránea. Es decir, estas prácticas no forman parte de nuestra tradición indígena, aquí se encuentran otros sistemas tales como; la homeopatía de Alemania, la terapia floral de Inglaterra, la acupuntura de China, la Ayurveda de India, que actualmente ya se han ido incorporando dentro del concepto de la medicina integrativa, con médicos y hospitales que aplican algunas de estas terapias como el San José y el Barros Luco, entregando un beneficio más completo para los pacientes”, agregó Rudolphi.
Por esta causa, en 1991 la Organización Mundial de la Salud decretó el 22 de octubre como Día Internacional de la Medicina Natural, con el cual se planteó rescatar, preservar y difundir todos los conocimientos sobre este tipo de medicina. Además, promover políticas que garanticen una eficaz y segura utilización de las medicinas tradicionales.