Aunque lo ideal es evitar todos los productos procesados con químicos que afectan a nuestro cuerpo, la realidad es que a veces es imposible por el estilo de vida que llevamos. La decisión de tomarlos o no está en cada uno.
Pan de molde
©
A nadie le gusta encontrarse un pelo en la comida, pero eso es lo que podrías estar tomando cada vez que te preparas unas tostadas. Una gran cantidad de pan comercial tiene un aditivo llamado L-cisteína, un aminoácido que alarga la vida útil del pan y que a menudo se sintetiza a partir del pelo humano. Algo realmente repugnante. Para evitar tenerlo en la boca, opta por el pan recién hecho de la panadería en vez del procesado que compras en cualquier supermercado.
Carne picada
Quizá hayas oído hablar de la «baba rosa». Es un relleno a base de deshechos cárnicos tratados con químicos para que sea legalmente apto para el consumo humano. Muchas cadenas de comida rápida los utilizan por lo que todos las hemos comido, pero hay que ser conscientes que una buena parte de las hamburguesas están hechas, principalmente, con tendones, lenguas, encías, párpados, hocicos, intestinos, rabos y sangre… efectivamente 100% vacuno.
Estos «recortes» de la carne se calientan, se centrifugan con el fin de eliminar la grasa, y la masa resultante se trata con hidróxido de amonio en forma de gas para higienizarla e inactivar los posibles patógenos. Por último se corta en porciones, se comprime y se congela para un uso posterior. Lo «seguro» desde el punto de vista sanitario no tiene por qué ser sinónimo de «aceptable»nutricionalmente hablando, muy en especial cuando el producto no va etiquetado y el consumidor no tiene posibilidad de elección al respecto.
Cerveza
Seguramente un vegano pensará que puede tomar cerveza porque no tiene ningún ingrediente animal en su composición. Error. Muchas se filtran a través de isinglass, unagelatina hecha de vejigas de pescado. Mientras que muchas marcas están comenzando a deshacerse de este clarificante natural otras lo siguen conteniendo, por lo que hay una posibilidad muy grande de que te lo hayas tomado en algún momento.
Por ejemplo, Guiness lo ha eliminado en gran parte (aunque no completamente) porque el proceso le está costando más de lo esperado. Para comprobar que tu cerveza está libre de pescado, puedes consultar la base de datos de Barnivore y descubrir si tu marca preferida es 100% de origen vegetal.
Queso rallado
©
Muchos asumen que este tipo de lácteo es simplemente uno normal al que han hecho trozos más pequeños para poder espolvorearlo en la pasta, pizzas o ensaladas. Pero nada que ver con la realidad. Este formato de queso tiene un ingrediente adicional inesperado que no se encuentra en el resto de su «familia»: serrín. Exacto, estas partículas de madera se añaden adicionalmente aunque no lo verás en la etiqueta de su composición. Su nombre oficial es celulosa y se añade para aumentar la fibra y añadir cremosidad en los alimentosbajos en grasa ayudando a que esta ralladura se agrupe. En otras palabras, se utiliza para abaratar los costes de su fabricación.
Fuente: elconfidencial.com