Al puntaje nacional obtenido por Ulises Campodónico en la PSU de Matemáticas, el colegio El Salvador de la comuna de San Vicente sumó un nuevo logro este 2016, luego que el ranking elaborado por la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso con los 100 mejores colegios, lo situara en el lugar 65 a nivel nacional y como la segunda mejor institución particular subvencionada del país, al promediar 652,5 puntos en la Prueba de Selección Universitaria.
De esta forma, el colegio El Salvador consiguió ser el mejor establecimiento en la región de O’Higgins, superando a colegios particulares pagados y municipales.
Respecto a los logros, su rector el padre Paulo Talet sostuvo que “nosotros como colegio hemos hecho un esfuerzo grande por tener estos resultados, los que hoy día son mejores que en años anteriores. El estar en el segundo puesto a nivel de colegios particulares subvencionados es motivo de gran alegría”, expresó.
En la misma línea y respecto a la estrategia utilizada para ocupar este lugar y liderar en años anteriores el ranking regional, la autoridad académica sostuvo que se debe “esencialmente al trabajo en conjunto entre lo que es la dirección, los docentes y los papás, es decir, la familia”.
“Nosotros como proyecto educativo siempre tenemos presente y le manifestamos a los apoderados que los resultados que se puedan tener, no solamente en estas mediciones sino a nivel de toda la gestión del colegio, la importancia del apoderado en el qué hacer de la vida del colegio es indispensable”, agregó Talet.
Enfatizó en la importancia que tiene el apoyo de los apoderados para obtener estos resultados, pues el compromiso de los padres y el respeto al mismo proyecto educativo, son parte fundamental de la estructura formativa implementada.
“Nosotros como proyecto educativo partimos en que queremos formar un hombre íntegro, con valores cristianos, cuando hablamos de integridad es aquella persona que es capaz no solo de tener buenos resultados académicos, sino también de desenvolverse en todas las situaciones del qué hacer humano, capaces de solidarizar, y no solidarizar por aparentar, sino que como una respuesta de la enseñanza que han recibido, respetar al prójimo en todas sus dimensiones”, concluyó el rector.