La Superintendencia de Educación organizó una jornada de acompañamiento y asesoría para los sostenedores de la región, la cual fue diseñada para que aclararan sus dudas e inquietudes respecto a la rendición de cuentas de las subvenciones.
El ex director regional de la entidad, Juan Ramón Godoy, señaló que “nuestra propuesta es que efectivamente los recursos que fueron entregados sean utilizados, se les dé un buen uso para mejorar la calidad de la educación”.
En la misma línea, indicó que “la Superintendecia tiene que velar por el cumplimiento de la normativa educacional y el buen uso de los recursos, en ese caso, cuando no hay una rendición de cuentas no sabemos en qué efectivamente fueron gastados los recursos que fueron entregados”.
Godoy recordó que cuando este proceso no se lleva a cabo correctamente “hay procesos administrativos que llevan a multas muy elevadas”.
Pero ¿en qué consiste la subvención escolar y a cuánto dinero equivale? Se trata de recursos de origen fiscal que, vía transferencia, se destinan a los establecimientos particulares y municipales de enseñanza por el servicio educacional prestado, con el objeto de ayudar a financiar su funcionamiento para el logro de sus objetivos.
Por cada uno de los niveles y modalidades de enseñanza existe un valor por alumno, diferenciándose el monto según el alumno sea atendido con o sin jornada escolar completa diurna.
El pago al sostenedor parte de la base de que un alumno de educación básica sin jornada completa recibe $47.002, mientras que uno con jornada completa $64.573. La subvención de la educación escolar especial alcanza los $189.403, mientras que la media los $76.836.
La Subvención de Educación Especial tiene un monto aproximado de tres veces lo que es la Subvención regular, llegando a un máximo de $163.252 por persona.
También se suma la subvención por mantenimiento, la cual tiene por objeto apoyar el financiamiento de los gastos que irrogue el mantenimiento de los establecimientos educacionales, tales como las obras de conservación, reparación y reposición necesarias para la adecuada conservación física de los locales. El monto promedio es de $15.000.
Asimismo, el Estado pagará entre 50 mil y 120 mil pesos adicionales a los sostenedores de establecimientos municipales y particulares subvencionados que acrediten haber matriculado y retenido alumnos que pertenezcan a las familias beneficiarias del Programa Chile Solidario. También existe una subvención a internados y un aporte por esfuerzo educativo.
Godoy destacó que en el monto de las subvenciones radica la importancia de que sean justificadas.