El alcalde Boris Acuña comenta cómo proyecta a Doñihue.
Hablar de Doñihue es hablar de Chacolí, de tradición huasa, pero sobre todo de chamantos. Esa raigambre es la que autoridades locales están tratando de mantener y proyectar en el tiempo, considerando que las artesanas de toda la vida en el pueblo ya sobrepasan los 80 años.
Un gran impulso para estos fines lo constituye el reconocimiento entregado por World Crafts Council, una institución mundial de artesanía que premió recientemente a la comuna como “ciudad artesanal”.
El alcalde Boris Acuña comenta que en 2013 comenzó la postulación para obtener esta condecoración y explica qué beneficios supone para Doñihue. “Es una categoría que adquiere nuestra comuna que nos permite tener muchos más puntos internacionales de comercialización de productos artesanales, por lo que es un tema muy relevante. Está la posibilidad también de postulación a proyectos de infraestructura o de cualquier otro tipo a nivel no solamente nacional. Y también estamos dentro de las rutas turísticas culturales, que están muy de moda”, sostiene el jefe comunal.
La distinción es parte de un esfuerzo municipal por aprovechar las tradiciones que le dan identidad a este lugar para beneficiar a todos sus habitantes. “Nuestra preocupación está orientada al desarrollo económico de nuestra comuna, cómo potenciar polos de desarrollo que tenemos y que tienen que ver fundamentalmente con nuestra identidad”, precisa Boris Acuña. En este sentido expresa que “uno de los polos de desarrollo económico importantes está en el sector de Camarico, donde tenemos un programa de remodelación urbana que está en la segunda etapa y se va a construir próximamente la sede de las chamanteras. Nosotros hemos hecho permanentemente talleres, por lo tanto, tenemos una cantidad de chamanteras que nos puede permitir el recambio”.
El alcalde, además, realiza un balance de su gestión al frente de la comuna. “Hemos tenido que recomponer confianzas con la comunidad y, por lo tanto, independientemente de los proyectos que se van consiguiendo, que son proyectos materiales, lo primero era crear esta confianza entre las autoridades y la comunidad porque todo eso se había quebrado”, asegura. Acuña agrega que “nos habíamos planteado este desafío y creo que hasta el momento lo estamos llevando bien a cabo, creo que estamos recuperando esa confianza y hemos podido plantearnos una serie de iniciativas donde se incorpora también la participación ciudadana. Cualquier tema que nosotros podemos proponer, si no cuenta con la participación ciudadana, no es válido, no queda bien estructurado”.
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