De acuerdo a Pedro Larraín, la prueba se aplica a los estudiantes para tomar medidas que permitan reforzar la comprensión lectora.
Los resultados del primer Simce de Comprensión de Lectura aplicado a alumnos de segundo básico del país, demostraron que en la Región de O’Higgins el 25% de éstos no cuenta con capacidades de comprensión lectora.
Además, la medición arrojó que 21 comunas de la Región obtuvieron puntajes bajo la media nacional.
La prueba, que se tomó a 11 mil 853 alumnos de 462 establecimientos de O’Higgins, dejó ver que el 75% de los niños podían encontrar la información en los textos que se le presentaban, y sólo el 50% tenían desarrolladas las capacidades deductivas.
En cuanto a los mejores evaluados, el establecimiento con mejor desempeño en la prueba fue la escuela municipal Santa Amalia de Requínoa que alcanzó 304 puntos, con lo que también se posicionó como una de las diez mejores del país. Le siguieron el colegio Criptocarya Alba, de la comuna de Peumo, con 299; y el colegio Saint John de Rancagua, con igual puntaje.
Además, los datos entregados demuestran que entre los 10 recintos que encabezan el listado de rendimiento, se cuentan tanto rurales como urbanos y que entre los mismos existen municipales, particulares pagados y particulares subvencionados.
Para el seremi de Educación, Pedro Larraín, la aplicación “ayuda a detectar en la temprana edad, entre los 7 y 8 años, que corresponde a segundo básico, el nivel de comprensión lectora de los estudiantes y, de esta forma, nos anticipamos a la información que se tenía antes que sólo se daba en cuarto básico”.
Larraín destacó que “nuestro objetivo con este Simce no es generar competencia en los establecimientos” y agregó que la idea es “entregar elementos, indicadores, objetivos para reforzar la comprensión lectora”.
Además, el seremi resaltó el trabajo efectuado en las comunas de La Estrella, Peralillo, Santa Cruz, Machalí, Chépica, San Vicente, Litueche, Marchigüe y Doñihue, las que se ubicaron por sobre el promedio nacional.
En relación a las medidas que se han implementado para fomentar la lectura, Larraín señaló que entre éstas se cuentan que desde el 2010 se comenzó a trabajar con el plan «Lee Chile Lee», que tiene acciones específicas en el aumento de bibliotecas de aula y de las colecciones de libros, especialmente en los preescolares.
A esto se suman las capacitaciones a las educadoras de párvulos de toda la región para el plan de Fomento de la Lectura y el aumento de libros leídos por cada niño, que pasó de 1,3 en 2010, a 4,7 en todas las escuelas de la Región y que las bases curriculares ahora hacen explícito el objetivo de aprender a leer en primero básico.
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