El Código del Trabajo en Chile establece con claridad las causales de despido y las obligaciones de los trabajadores, pero también contempla situaciones excepcionales en las que los empleados pueden ausentarse de sus funciones sin temor a perder su remuneración ni su fuente laboral.
Entre los permisos pagados más relevantes figura el derecho a ausentarse por matrimonio o acuerdo de unión civil, que otorga cinco días hábiles continuos adicionales a las vacaciones, con previa notificación al empleador y posterior entrega del certificado correspondiente.
Asimismo, el fallecimiento de un familiar cercano da derecho a un permiso pagado, que varía según el vínculo: 10 días corridos por un hijo, 7 por cónyuge, conviviente civil o hijo en gestación, y 4 días hábiles por el fallecimiento de un padre, madre o hermano.
También se contempla medio día de permiso para vacunarse en campañas de salud pública, con previo aviso al empleador y posterior comprobante, así como medio día anual para realizar exámenes médicos preventivos como mamografías, papanicolau o exámenes de próstata.
Además, los voluntarios de Bomberos tienen derecho a acudir a emergencias durante su jornada laboral sin que esto afecte su salario ni pueda considerarse abandono injustificado del trabajo.
Por último, madres, padres o tutores legales de menores diagnosticados con trastorno del espectro autista (TEA) pueden ausentarse para atender emergencias en los establecimientos educacionales de sus hijos, considerando ese tiempo como trabajado.
Estos derechos, además de proteger la estabilidad laboral, reflejan un avance en el reconocimiento de las necesidades familiares, de salud y de servicio público dentro del marco del empleo formal en el país.