El turismo es considerado como catalizador para la paz, el entendimiento mutuo y la amistad entre las personas en todo el mundo. Por ello no extraña que en este año tan convulsionado a nivel mundial, se haya escogido el eslogan “El turismo y la Paz” para las celebraciones del Día Mundial este 27 de septiembre.
El secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, indicó al respecto que “construir la paz es un acto consciente, audaz e incluso radical. El turismo sostenible puede transformar las comunidades, al generar puestos de trabajo, fomentar la inclusión y fortalecer las economías locales”. Agregó que el turismo “como valora y preserva el patrimonio cultural y natural, puede ayudar a reducir las tensiones y alimentar la convivencia pacífica”.
Nuestra Región de O’Higgins tiene importantes lugares que relevan su carácter turístico y cumplen plenamente esa conexión que hace ONU con la preservación del patrimonio y promover la convivencia pacífica. Esta Sewell, también llamada la “Ciudad de las Escaleras” o Santa Cruz, un lugar de museos, de excelente vitivinicultura y lugar de descanso. Porque no mencionar también Pichilemu, la capital del Surf, en que el deporte suma el encanto turístico de dicha disciplina con parajes de talla mundial para su práctica. O simplemente, algo más moderno, como como Monticello, un recinto de entretención de alta calidad, que reúne en un solo espacio un casino, una sala de espectáculos, hotelería y gastronomía de alto nivel.
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