En Chile aún no se conoce con exactitud el número de personas celiacas, pero se estima que es similar a lo que sucede en Argentina: 1 caso por cada 200 habitantes. La enfermedad celiaca consiste en un daño provocado en el intestino delgado, dado que al consumir gluten, el sistema inmune ataca el revestimiento de este, impidiendo, por consecuencia, que absorba los nutrientes necesarios para el organismo
“Lo más importante es poner atención a los síntomas posibles, pues un hallazgo tardío de la enfermedad podría resultar en daños grandes en el intestino que provoquen otras enfermedades o alteraciones como anemia, osteoporosis, cansancio, desnutrición, entre otros”, comenta Paulina Hernández, nutricionista y jefa del programa ‘Vivir Bien’ de Sodexo.
El gluten es una proteína presente en el trigo, la avena, la cebada y el centeno (TACC), de ahí que muchos de los productos declarados sin gluten tengan la advertencia “Sin TACC”, la cual certifica que ese alimento está exento de gluten.
Es muy común que esta condición muchas veces se traspase de un familiar directo a otro. Además, puede presentarse a cualquier edad, desde los primeros años de vida hasta la adultez. “La enfermedad celiaca es difícil de diagnosticar a simple vista, porque tiene muchas formas y síntomas que pueden asociarse a otra condición, pero siempre debemos estar atentos a la posibilidad de la existencia de ésta en nuestros pacientes”, señala Paulina Hernández.
Destacar que ser celiaco no es lo mismo que ser intolerante al gluten, ya que se trata de una condición diferente con distintos síntomas y recientemente descrita. A diferencia de la enfermedad celiaca, la intolerancia al gluten es una reacción causada por un alimento que contiene gluten, pero que no afecta al sistema inmune ni causa daños en los tejidos, y cuando se presenta, los exámenes para determinar la enfermedad celíaca resultan negativos.
¿Cuáles son los síntomas más comunes?
· Diarrea persistente.
· Dolor e hinchazón abdominal recurrente.
· Meteorismo (gases excesivos).
· Desnutrición que provoca diferentes carencias y se produce por la mala absorción de nutrientes como grasas, hierro, fosfato, calcio y vitaminas.
· En las mujeres se puede presentar con retraso en la pubertad o en la primera menstruación, infertilidad y abortos repetitivos.
· Otros síntomas frecuentes son fatiga, depresión, irritabilidad y otras alteraciones sicológicas.