Según la investigación, su madre habría dejado a la lactante sola en su casa y cuando volvió ya estaba muerta.
Los vecinos relataron a la policía que «su lengua, ojos y dedos habían sido comidos» por ratas gigantes, quienes aseguran que esa zona está llena de este tipo de animales.
La portavoz de la Policía de Katlehong, capitán Mega Ndobe, aseguró que a la prensa que «la bebé murió luego de ser comida por ratas. La madre fue arrestada y enfrenta cargos por negligencia infantil».