Gerente de O’Higgins se reunía ayer con el directorio del club para ver las acciones a seguir.
En su dilatada trayectoria en el fútbol chileno, Pablo Hoffmann, gerente general de O’Higgins de Rancagua, en conversación con El Tipógrafo señala que “nunca me había pasado algo tan delicado como lo ocurrido el sábado”, en relación a las duras amenazas de muerte recibidas por un directivo de Palestino.
Camino a los vestuarios del Estadio Municipal de La Cisterna, el experimentado funcionario celeste fue encarado sin provocación alguna por José Miguel Abukhalil, director del Fútbol Joven de Palestino, quien -además de emitir conceptos de atentar contra la vida de Hoffman- lo trató de “racista” y “traicionero”, por apoyar el artículo de la ANFP que iba en desmedro del interés del club tricolor de usar el mapa de Palestina íntegro en su camiseta.
“Esta situación viene del asunto de un artículo de la ANFP que tuvo otra connotación y ellos la miraron de una manera diferente”, inicia la conversación Hoffmann por el capítulo vivido el último sábado, ante lo cual también reconoce que “no me sorprende nada, solo me molesta”.
En aquel instante, el ex gerente de la ANFP, no solo fue centro de ataques por parte de Abukhalil, ya que también emitió fuertes y llamativos cuestionamientos a su labor Jorge Siade Jadue, ex presidente de Palestino.
“El señor Hoffmann le hace mal al fútbol, tiene la conciencia cauterizada y debería pensar en retirarse”, se sintetizan las duras palabras de Siade, quien separó a los directivos cuando los ánimos ya estaban muy caldeados por parte de Abukhalil.
Sobre el calibre de estas declaraciones, Pablo Hoffmann deslizó que “claramente son una falta de respeto, pero cuando alguien amenaza de muerte, esa persona se enajena y todo lo que diga después no tiene ninguna significancia. Si ya te amenazan de muerte no tienen límites en lo que pueden decir después”.
Por lo mismo, Hoffmann prefiere quedarse con la rápida respuesta del actual presidente de Palestino, Fernando Aguad, quién le pidió disculpas personalmente y antes había declarado a los medios de prensa que presenciaron la escena: “No vi ni escuché nada, sólo salí a calmar los ánimos”.
En tanto, sobre las acciones que podría tomar el club de O’Higgins contra este delicado momento que le tocó vivir, Pablo Hoffmann mantiene cautela y asegura que “eso lo vamos a tratar internamente”.
Durante la jornada de ayer el directorio de O’Higgins se reunía como todos los lunes, para analizar y planificar la actualidad del Capo de Provincia, y sobre la mesa estaban las amenazas de muerte recibidas por su gerente proferidas por gente ligada a Palestino.
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