¿Te imaginas pagar un gran monto para disfrutar en vivo de unos de los espectáculos deportivos más grandes del mundo y perdértelo por quedarte dormido? Eso fue lo que le ocurrió al protagonista de un video grabado en el reciente Super Bowl y que se hizo viral casi de inmediato al ser publicado en YouTube.
En el vibrante encuentro que disputaron la noche del domingo entre los San Francisco 49ers y los Kansas City Chiefs, donde los boletos para alentar a su equipo favorito desde las graderías llegan a costar miles de dólares, un aficionado saltó a la fama en YouTube y en otras redes sociales al tomar sin querer la siesta más cara del mundo.
Fuente: Mag El Comercio