Un nuevo homicidio se sumó a la larga lista de hechos de este tipo que alteran la tranquilidad de los vecinos del sector oriente de Rancagua. El último ocurrió la madrugada del sábado tras una discusión entre dos jóvenes.
Según informó tras el hecho Diario El Tipógrafo, conforme a lo informado por el comisario de la PDI, Alfred Bruce, “la víctima habría recibido, aparentemente, alrededor de tres disparos de escopeta que le habrían provocado lesiones en extremidades superiores, abdomen y en la parte superior del tórax, heridas cuya gravedad le habrían provocado la muerte”.
Luego de concurrir al SAR Oriente, donde fue llevada la víctima, el personal de la PDI se trasladó al sitio del sitio del suceso ubicado en calle Edmundo Cabezas con pasaje Aukan, donde fijaron y levantaron evidencias, además de realizar empadronamientos y registro de declaraciones a testigos.
Según información recopilada, el joven antes de los hechos estaba en la calle, oportunidad en la cual habría sostenido una discusión con un adolescente de 17 años, quien le habría disparado en reiteradas ocasiones con una escopeta “hechiza”, para luego darse a la fuga.
Posteriormente, y de acuerdo a las indagatorias, se pudo establecer que víctima y victimario habrían sido amigos. Lo que falta por dilucidar es si el imputado habría estado bajo la influencia de algún tipo de drogas al momento de cometer el delito.
Inicialmente se hablaba de que había más personas involucradas, pero aquello se descartó, de acuerdo a información policial.
Cercanos a la investigación sostienen que aparentemente sería el consumo de algún tipo de estupefacientes el que habría propiciado la agresión. Eso sí, esto no está acreditado por algún examen toxicológico. El autor del crimen se entregó bastantes horas después del hecho delictual y no se puede ver la trazabilidad de la droga en la sangre.
Otro dato de la indagatoria es que el arma hechiza ocupada por el adolescente aún no ha sido encontrada. Pero el tipo de lesión que presentaba la víctima darían cuenta de que se trató de un armamento de este tipo. Entre las lesiones que sufrió el joven de 19 años tenía una a la altura de la clavícula y otra en el antebrazo izquierdo. Según fuentes policiales se trató de disparos realizados a corta distancia, puesto que todos los perdigones estaban concentrados en áreas reducidas.
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