Las cifras de VIH han causado alarma pública en el último tiempo. En la región de O’Higgins, por ejemplo, entre 2007 y 2017 se notificaron 1.309 casos (130 en promedio por año); y en 2018, entre enero y septiembre, ya van 149 confirmados.
A nivel nacional, el año pasado los casos de VIH superaron los 5 mil; mientras que en el 2016 llegaron a las 4.927.
Eso no es todo: Solo entre enero y junio de este año se han confirmado 3.849 casos a nivel nacional. Cifra que se concentra en jóvenes entre 15 y 29 años.
Una realidad preocupante que obliga a generar políticas públicas en materia de autocuidado y prevención; así como también en medidas que permitan evitar su propagación.
Este sentido, ya se están aplicando en la región de O’Higgins los test rápidos para detectar el VIH. Según la Seremía de Salud serán 5 mil los test que serán distribuidos en las 33 comunas.
Una medida clave ya que, una vez diagnosticado, permite enfrentar esta enfermedad a través de un tratamiento médico oportuno, y también contribuye a evitar la propagación por desconocimiento.
Los resultados de un cuestionario voluntario a personas que se hicieron el test de VIH en el Hospital Clínico de la U. de Chile, demuestran que el 70% había tenido hasta tres parejas sexuales en los últimos 12 meses y que el 18% nunca había usado preservativo.
Por ello, se debe seguir haciendo hincapié en la prevención y autocuidado, a través de campañas eficaces que permitan revertir la baja conciencia que existe entre los jóvenes por adoptar una conducta segura en materia sexual.
A lo anterior se debe sumar un reforzamiento de la educación sexual en los colegios y permitir un mayor y mejor acceso a métodos de cuidado eficientes por parte de la población que está más expuesta.
Medidas que en su conjunto permitirán hacer frente a esta alarmante cifra que hoy amenaza con seguir en aumento si no se enfrenta de la manera adecuada.
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