Juzgados civiles de Rancagua contarán con nuevo edificio para atender a sus usuarios

Actualmente los juzgados se ubican en un edificio de tres pisos en calle O’Carrol.

Con el objetivo de entregar una mayor comodidad y atender con los estándares de seguridad necesarios, desde el próximo martes 30 de junio, el 1° y 2° Juzgado Civil de Rancagua comenzarán sus funciones en un nuevo edificio. Si bien se trasladan a un nuevo lugar, su ubicación definitiva será en el edificio del Poder Judicial, el cual estaría finalizado a fines del 2017.

“El nuevo edificio tiene múltiples beneficios tanto para los funcionarios como los usuarios. En primer término, este edificio nunca ha cumplido con los estándares de seguridad (…) estamos en 250 metros cuadrados cada tribunal, lo que obviamente incide en que hay un hacinamiento en el trabajo de los  funcionarios”, explicó la jueza titular del Segundo Juzgado civil de Rancagua, Natalia Rencoret.

Actualmente, los juzgados se ubican en un edificio de tres pisos en calle O’Carrol, donde cada tribunal cuenta con un espacio insuficiente para la cantidad de funcionarios y usuarios que asisten diariamente. Desde el martes sus funciones las albergará el edificio ubicado en avenida Bello Horizonte 781 (Torre C) en el noveno y séptimo piso, respectivamente.

Al respecto, la juez titular explico que “el nuevo  tribunal va a contar con aproximadamente 430 metros cuadrados por juzgado, tiene baños para discapacitados y toda la tecnología necesaria, en definitiva, cumple todos los estándares para que un tribunal trabaje como corresponde”.

Son 40 funcionarios los que se verán beneficiados, y entre 200 y 300 personas que diariamente asisten a estos juzgados. En este sentido, desde que se concretó el cambio se han sostenido diversas reuniones con los usurarios abogados, abogados de cobranza y receptores judiciales para informar sobre la nueva ubicación.

La inauguración de las nuevas dependencias será el próximo viernes 3 de julio y contará con la presencia de las ministras de la Corte Suprema, Rosa Egnem y Gloria Ana Chevesich, además de la presidenta y ministros del tribunal de alzada de Rancagua.

“Hemos tenido mucho apoyo por parte de la Corte de Apelaciones y también de la Corte Suprema, siempre estuvieron insistiendo para que pudiéramos obtener un edificio más adecuado”, manifestó la magistrada Rencoret.